Elucubrar

Como lubricar ideas, me parece, o algo parecido. Elucubrar ensoñaciones es como embobado soñar con los ojos abiertos. Y nos tunden con piedras y garrotes en el alma, mientras nosotros andamos mirando el rabo a las nubes y las colas en los bancos, aburridos, endemoniadamente superfluos animales. Estampo mi rostro en el espejo y lo dejo allí seguro que la edad es algo fija. Susurro cantos mientras escribo Roma o París. Este elucubrar a veces se anda por las ramas. Un día tendré un perro a quien ponga de nombre elucubrar. Los perros  se alegran cuando uno llega y se apesadumbran cuando uno se va.
Hasta el cementerio llegan, los perros, atrás del cortejo. Y se quedan allí hasta lo último, esperando que reviva el último de los mortales con nombre y apellido que les hizo fiesta en su cumpleaños. Salud, declamando el Nocturno a Rosario.

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