Oímos

Oímos. Y vamos con los ojos cerrados escuchando voces, canto de sirenas, música de violines, saxofones. El golpe de las olas en sí infinito acometer. Y oímos el ascenso de angeles y cometas. Oímos los colores. Que de tan suaves nos orden la caricia. La noche y el día. Con sus luciérnagas y mariposas. Cierro los ojos. Y el silencio Escuchamos. En la voz del poeta. Oímos y el crepúsculo sinfónico se afina con lo sensual del sonido de incendio. En el amor crepitamos. Albricias.

Comentarios

Entradas populares de este blog

lecturas 20. Poemas de Carlos Pellicer Cámara

De cartas

¿Por qué así, señor periodista?