Instrucciones para no volar

Amarre piedras al tobillo, y repita la misma canción de moda de los 80s; cuide sus 20 mil libros y que nadie le robe uno; dibuje una flor roja con hojas verdes; y hable de  libertad y alas. Y si el cuerpo quisiera revelarse y aventurara saltos de más en lo posible, desactive el tiempo. Y repita muchas veces la mentira. Suele suceder que los vuelos son inevitables, cuando las caídas se da uno cuenta.
  

Comentarios

Entradas populares de este blog

lecturas 20. Poemas de Carlos Pellicer Cámara

Rigo Tovar y Chico Ché

Max in memoriam