Pienso en otras cosas. Otros temas. Y estás tú. A dicha plena las palabras. La sonrisa. Y la mirada de luz brillante en la  pupila. Pienso en la filosofía de Grecia. En poetas latinos. En historias de Roma. Y estás tú. Sé que por bien y no por mal. O por Mar. Modalidad de genio de lampara. O modo de vuelo.. es acaso la Ventura de saberte cerca. O la desventura de lejos. El poema es real. El libro de arena y sol. Y estás tú. Porque estás en todas partes. Pienso en otras cosas. Y apareces tú. Que genio tiene convenio contigo. Trato de juego. Para hacerte  aparecer en luz cuando la oscuridad. O en vino o agua simple. O a esta justa hora del silencio. Un Dios que no me olvida. Que me da otro día. Otro anhelo. La salud. Y el pensamiento y las palabras.  Los libros. La guitarra. Que siendo una. Nombró a todas. La noche es un modo de danzar del universo. Modo de viajar a los confines. Despertar es la
Conciencia que existimos. Tú, yo. Todos. Y que el universo es más grande que la imaginación. Y el hombre es pequeño. Muy pequeño. Como la nada. La duda. El reto filosófico de conocer la fórmula de la existencia. Y estás tú. La dicha. La conciencia. Estamos. Es ganancia. Me acompañas en las batallas diarias. Me das la espada que no existe.

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