Utopia

Amarraron a utopía y quimera. Por un quítame esas pajas. Porque no estaban convencidas de quedarse quietas. Las amarraron con nudo Giordano y marino. Para que tarden los levas y levantados en desatarla. Utopía acostumbrada al escarnio quedó serena. Quimera lanzaba gritos como insultos. A los lebreles que defecan el oceano. A los que matan la paloma de la paz. La usura unida a sus capataces. Cuellos blancos. Jerarcas del vomito. Reyes de la ignominia. Utopía salta las trancas. Y anfibia en el agua, ave en el aire,  corrigió la plana. Y repetir que eso no se hace. La utopia y quimera son huesos duros de roer. Quimera hace fiesta. Utopía se órgano, a para lo que sigue. Mientras canta Santiago liberada. Los niños de párvulo aprenden a leer y a escribir. Y con la maestra aprenden canciones de esperanza. Y nudos a desatar. Deja a los niños que rían. De ellos es el futuro de la patria.

Comentarios

Entradas populares de este blog

lecturas 20. Poemas de Carlos Pellicer Cámara

De cartas

¿Por qué así, señor periodista?