La rosa es su aroma

La rosa existe sólo si la miran¿? O existe sin conciencia alguna que le eche una mirada¿? No es asuntó baladí. Las mismas preguntas se aplican al libro, al agua, al hombre. Yo por ejemplo escribo. Bien o mal, no es tema. Escribo y punto. Escribo y me leo. El hecho de escribir me da una sensación de existencia. Parpadeos, sueños, juegos pirotécnicos. Otro tema es si me leen. ¿Dejaría de escribir por el hecho de constatar que nadie se asoma a lo que escribo? No. Escribo como respiro. Escribo como guiño a la vida. Ayer no estaba aquí. Hoy por aquí ando espantando el vacío. Escribo que sueño. Y sobre el mañana, en el afan de descifrar el futuro, no tengo ni idea. Un amigo hace 35 años dijo: soy eterno. Y allí anda aún  caminando en los textos con muletas y el cabello ralo. La rosa es su perfume, dice  el ciego.

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