Temblor

Movíamos las fichas cuando de pronto tiembla. Y todos a una en movimiento despavorido. Reyna y rey por el suelo junto con peones, alfiles y caballos. No importa casilla blanca o negra. Torres. Pero tiembla. Los candelabros en rítmico movimiento. Y los cardenales de por si a punto de escapada. Todo a un tiempo como explosión donde se acaban las palabras y los ritos. Como sonámbulos biombos a la deriva mostrando los dientes para esconder la calavera en la risa discuten sobre precios de preciosos ritmos de carnaval. La vida. A ver si el martilleo determina al ganador de la subasta. Basta. Diremos unas cuantas palabras más sobretodo ahora cuando más se necesitan. Nubes. Lluvia. Y los truenos escandalizan mientras tiembla. Gracias, adiós. Hasta el fin del mundo. Pero el fin al fin.

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