Cultura y gobierno

Agradezco la invitación generosa que me hicieron los integrantes del taller literario El libro vacío, para venir a charlar sobre el tema Cultura y gobierno. Tema por demás amplio, que implican definiciones y conceptos, pero sobre todo, la forma como hemos adoptado dichos conceptos, y que definen nuestra actuación en los distintos ámbitos en los que nos desenvolvemos.

Uno nace en determinada geografía y como descendiente de una línea familiar. Cargados ya de ciertos percepciones, que van teniendo claridad conforme nos vamos apropiando del lenguaje, y vamos desarrollando nuestro pensamiento.

Nacimos en una área específica, en un tiempo determinado. Y conforme vamos creciendo, la influencia que recibimos de los adultos que nos rodean, y luego de nuestros ambientes escolares, vamos ampliando nuestra percepción del mundo (que primero fue nuestra familia y casa, luego nuestro barrio o colonia, y luego en la escuela supimos que el mundo era mucho más grande que esas áreas nuestras de desarrollo y crecimiento.

Entonces por ejemplo primero en la escuela primaria y posteriormente en la secundaria fuimos dándonos cuenta que crecimos cada quien en una situación económica distinta (sea de precariedad o abundancia), y asimismo con padres distintos en cultura. Analfabetos, semi analfabetos, analfabetos funcionales, con instrucción mínima o con instrucción máxima, con modos y modales distintos, tanto en comportamiento como en la manera de hablar, de decir, de reclamar, e inclusive en nuestra forma de caminar o de comer.

Si nuestros padres eran aficionados y practicantes de un deporte; si eran creyentes, de qué tipo de religión practicaban, si nuestros padres eran lectores o no, o si sabían que había actividades artísticas, si asistían o no. Todo ello fue determinando nuestra manera de ver las cosas, y sobretodo de conceptualizar la vida en general, la existencia humana en particular.

Así nos dimos cuenta que habitamos un país llamado México, que nuestra familia era muy distinta a las otras, que había una escuela a la que asistíamos, pero que había otras. Y nos dimos cuenta que teníamos una forma de gobierno, sobre los tres poderes, etcétera.

Cuando yo estaba en secundaria, por ejemplo, en la clase de civismo, el maestro dejó muy grabadas unas ideas. Una de ellas es que nuestro país se inventaba cada seis años; y que había países con una forma distinta de gobierno a la que llamaban socialistas. Y que en esos países los niños eran más sanos que nosotros. Y que su estatura normal eran tallas más grandes que nosotros.

En el mismo tenor de concebirnos parte de un país. Y luego de saber que este país tenía una forma de gobierno distinta a otros. Asimismo nos fuimos dando cuenta, y a esto la escuela nos ayudó, que había otro tipo de actividades que eran distintas a los conocimientos de ciencias exactas, y que referían a obras de teatro; expresión pública, declamación y canciones populares.

Aquí quiero referir que efectivamente nos fuimos dando cuenta de tantas cosas, pero lo concreto es que conformamos nuestros conceptos del mundo que nos rodea, tanto en lo físico, como en las ideas.

Como trabajador de educación que soy, siempre he considerado absurdo comparar resultados en cualquier orden, sea educación, deporte o ciencias. Simplemente nos organizamos distinto socialmente. Y