Apuntes de un profesor: Lecturas

Dos mamás sentadas en un parque con sus respectivos hijos. Una de ellas leyendo un libro y su hijo haciendo lo mismo. La otra mandando watsap en su celular y su hijo, igual. Esta última mira al otro niño leer y le pregunta a su mamá: ¿y cómo le hace para que su hijo lea?
El concepto de lectura técnicamente es amplio. De manera sucinta es la capacidad del ser humano de descifrar los signos escritos, y a la vez comprender lo que dice el texto. Si no comprende lo que lee, es que sencillamente no sabe leer. La lectura por gusto es fundamental y básica para el desarrollo del pensamiento, lo cual significa la capacidad para construir y exteriorizar las ideas, y hacerlo cada vez de manera lógica, breve y clara.
Una de las principales actividades escolares y de casa, debe ser la lectura de libros agradables para el niño. Libros que le gusten, que quiera seguirlos leyendo desde que lo inició en la primera página y que no quiera despegarse de ellos hasta terminarlos. Libros que se adecuen a su edad, con dibujos o sin ellos, libros bien diseñados e impresos. Para los niños puede ser sencillo acercarse y penetrar al mundo de las palabras y la imaginación. Mas el docente de grupo debe acercarlos a ellos. Y esto lo pueden hacer con mejores resultados los maestros lectores, los que se afanan en planear actividades lúdicas.
La lectura como hábito en los niños principiantes en esta actividad les va desarrollando la imaginación y se van apropiando del lenguaje, ampliando su dominio en cantidad mayor -cada vez- de palabras. Es preciso entonces que la materia de Español se transforme dinámica y emotiva en función de las palabras, de los talleres de escritura creativa, de pláticas sobre libros leídos. De esta manera  (y de muchas más) se va desarrollando el pensamiento en nuestros chicos escolares, y van
sintiendo una mayor seguridad en sí mismos.
Los niños aprenden de otras materias de acuerdo a su capacidad de dominio del lenguaje. Y esto lo van logrando con la lectura libre.