Qué día
Este día que ya es ayer. Rezumó vida. Palabras sin fin, de horas, por decirlo así. . Jugo verde y café. Y el desayuno común. Proyectos, sueños. Recordad. Y hablar del Kozer. Como si fuera especialista. Los libros traídos del DF. Poemas de este cubano judío. Prosa. Que desorden ese conjunto de hiperbatones. Ese deambular por temas distintos en cada verso. Que mal, que bien. Más ahora con el premio Neruda. Como una máquina de escribir, (no de follar como el libro de Bukouski), compulsión por exteriorizar millones de palabras. Contar y cantar del poema. Y seguir la tarde como en tres centímetros sobre el suelo por captar esa sensación del ser, de verdad. Los poros digan verdad en esa exultación. Y entrever luz como de bengala para celebrar. Esta vida. Belleza. Viernes de soñar. Elucubrar. Predecir. Yo quiero construir el paraíso. Y dame el aventón a París. Canción. celebración de vida. Ser.
Comentarios
Publicar un comentario