Armar rompezabezas

El modelo es muy sencillo. Para armar las piezas de cualquier manera no se requiere ciencia. Y sí preocupa el urdimbre. Y para  mejor analizar nube, gato, volcán, sangre y la mejor sonrisa, se requiere de paciencia. La novedad en este método es que no saldrá ni novela ni cuento. Y mucho menos poema. Aunque de atinarle bien, saldrá la canción perfecta. Un silencio me llama, un silencio me mata, un silencio me atrae. Eso es todo. Será ya de madrugada. Vendrá la luz. Nunca dije, nunca nada. Hoy me llegó una señal, como rabo de nube. Una rana en la charca.  Interpretar no es mi fuerte. Soñaré de nuevo, en armar rompecabezas. Se estila firmar al final. Bien dice fin, aún siendo la esperanza.

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