Porque llueve

Porque llueve. Precisamente por eso. Porque el agua es la memoria del tiempo. Y nos refresca. Lo que somos. Apenas polvo en movimiento. Las hojas secas. Y el limo. Llueve y la mirada se transparenta. El espejo se rompe de tanto que se asoman. Para ver las huellas de lo que va siendo el hombre. No piedra. No árbol. Nada en el tiempo breve. El viento sigue. El viento manda. El viento decide. Llueve. Y nos vamos quedando libres. Para no ser. Para el vuelo. Cuervos irredentos. Flechas sin trayecto. Llueve. Y arrastra el agua en su corriente lágrimas, deseos, anhelos.

Comentarios

Entradas populares de este blog

lecturas 20. Poemas de Carlos Pellicer Cámara

Rigo Tovar y Chico Ché

Max in memoriam