Algo de mí lleva el domingo

Se va el domingo. Y algo de mí lleva. Un limón americano ya sin jugo. Una imagen guardada del crepúsculo. Leí sobre el Ché. Con café al lado. Evocaciones románticas. Utopías bien plantadas y con frutos. Y dudas. Interpretaciones y versiones. El domingo se va y me lleva entre sus garfios de fiero tiempo. De a poco en poco. Hojas secas arrastradas por el viento. Un otoño que también se va de domingo a domingo, que te vengo a ver. Y volverá a ser domingo. Y nosotros los de entonces podríamos estar, digo, si acaso. La muerte arrebatará una tarde esta tristeza mía. Que lata perdurable. Como dato de identificación. Disfrutamos bien las horas. Entre soledad y sonrisas. Pintamos de colores el día. Verde que te sigo queriendo verde. Y las canciones que tarareao pegadas a la garganta. Fijaciones. El recuerdo sigue aferrado a no transitar hacia el olvido.

Comentarios

Entradas populares de este blog

lecturas 20. Poemas de Carlos Pellicer Cámara

Rigo Tovar y Chico Ché

Max in memoriam