Sentencia de muerte

I.-
Soy la libertad
Soy la democracia

¿No has visto la egregia estatua en Nueva York
donde turistas pobres
se toman una selfie de familia?
¿No has visto los cristalinos y grandes lagos,
 Michigan donde risas y gemidos ahogan las olas?
¿Los rascacielos de sus grandes metrópolis
que desafían la gravedad?
Las marañas de carreteras
Los grandes centros comerciales.

Te sentencio
Soy la libertad
Soy la democracia

Tenemos un destino común
un destino manifiesto. América
para los americanos. Africa
para los americanos. Asia
para los americanos

Negro esclavo
Soy la Ley
Soy el orden
Soy la democracia

II
Un hombre negro entra a una tienda
Tenía que ser negro
Toma algunos productos prescindibles
Intenta pagar con un billete en copia
con un cheque sin fondo

El encargado llama al policía
Datos del criminal:  negro y pobre
Llegan raudos. Lentes oscuros
Mastican chicle.
El hombre está en su auto
El que llamó sentenció: es un negro

Soy la Ley
Lo bajan
Soy el orden

Tres policías blancos en acción
Le ponen las esposas
Uno vigila, también blanco.
Tenían que ser blancos
Los  curiosos sacan su celular
graban

Se ve una patrulla
En el suelo un hombre negro  
Tenía que ser negro
Criminal negro tenía que ser
En su cuello la rodilla blanca
bajo el poliéster
Era una bella rodilla blanca

No puedo respirar
dijo el negro
no puedo
respirar
no
puedo
respirar.
No 

Ya había sentencia vieja
Desde mucho antes
en su barrio y en su escuela
Ya había sentencia
A sus abuelos y padres
En los campos de algodón.
A sus tatarabuelos trasladados en barco
Soy Estados Unidos
Soy la libertad
Soy la democracia
Sentencia: muerte






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