Adiós París, bienvenido Los Ángeles 2028

 1. La clausura de los juegos olímpicos de París 2024 llegó. En el evento, la bella Zago de Sagazhan canta "Bajo el cielo de París/ Veo pasear al amor/ Hmm/ Amantes que van mostrando/ su aire feliz/ Bajo el puente de Bercy/ se sienta el filósofo/ Curiosos los músicos/ Y miles de gentes paseando sin fin/ Bajo el cielo de París/ canta el amanecer..." Y esta ciudad es una fiesta. Y lo seguirá siendo en casi todos los ámbitos. Solo que todo principio tiene su fin. Así, luego de 15 días de competencias, se baja la cortina de estos Juegos Olímpicos. Y como por primera vez el maratón femenil fue de las últimas competencias, la premiación fue incluida en el programa. 

2. En el gran estadio nacional de París los atletas ingresan al campo con alegría desbordante. Ya no de manera organizada, sino todos juntos y revueltos, como filosofía de convivencia. La gradería, como es natural en este tipo de eventos, se encuentra llena de turistas de distintos países. El ritual patriótico es cantar la Marsellesa a todo pulmón. "Alons enfants de la patrie..." Y antes, León Marchand, nadador francés, que obtuvo cuatro oros y un bronce, ya había apagado el pebetero en el jardín del Palacio de las Tullerías, dejando apenas una breve flama para custodiarla y llevarla al Estadio nacional y pasarla como estafeta a los organizadores de Los Ángeles 2028.

3. En el centro del estadio, los continentes fueron representados por placas de aluminio con formas geométricas. Inició el desfile de los deportistas y las autoridades y se acomodaron en el centro del campo. Portan banderas y banderitas. Mexicanos con sombrero de mariachi. Los abanderados por México fueron la radiante Nuria Fernández, de gimnasia artística, y el valeroso Marco Verde, medallista de plata en boxeo.

4. Ondean banderas de todos los colores. Pero destacan las sonrisas y los gritos de alegría de los asistentes a la fiesta olímpica. Algunas atletas lanzan besos al aire de frente a la cámara que nos transmite la imagen. Una orquesta sinfónica instalada en el campo interpreta música del grupo Jocist. Y se escucha bien. Es el marco auditivo para esta ceremonia. Se escucha la Canción de los Campos Elisios: "Cuando los buenos americanos se mueren, se van a París". Y no podía faltar, de Fredy Mercury, "We are the chiampions" (Nosotros somos los campeones). El espectáculo coral se ve como un gigantesco karaoke coral, con miles de gargantas unidas. Tambien cantó Air, dúo francés de música electrónica integrado por Jean-Benoît Dunckel y Nicolas Godin y Phoenix: banda de rock indie originaria de Versalles, liderada por Thomas Mars

4. Antes eran los ganadores del maratón masculino los premiados en la clausura, como una muestra de fuerza, valor y resistencia, de honor y pundonor. Ahora París se echa hacia adelante en la equidad y justicia olímpicas al premiar a las ganadoras del maratón. Vemos allí a Sifan Hassan, de Países Bajos, quien derrotó en dramático final a la etíope Tigast Assefa. El bronce fue para Helen Obiri. Y no está demás decir que quien les entregó la medalla fue Thomas Bach, presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), acompañado por Sir Sebastian Coe, ex corredor británico.

5. Imágenes del maratón popular, abierto para todos los que quisieran participar, en el mismo trayecto que los oficiales. Para que mucha más personas puedan decir que participaron en los Juegos Olímpicos de París. Himno homérico a Apolo. 

6. Se agradeció a los más de 55 mil voluntarios, quienes como su nombre lo dice, de manera gratuita colaboran en apoyo de organización en todos los eventos deportivos. Y se nombraron a los nuevos atletas que conforman el Comité olímpico de jugadores, quienes tienen como responsabilidad contribuir con propuestas para mejorar las condiciones de las y los jugadores participantes en las distintas disciplinas. Los nombrados fueron: la atleta Allyson Félix, la gimnasta Kim Bui,  la piragüista Jessica Fox y el tenistaMarcus Daniell.  

7. Se oscurece el escenario. La parte central parece -con los efectos- como si viajáramos a la edad del hielo. Entre humo y penumbra, de lo alto baja el viajero del futuro al presente de desorden y deshechos. La tarea es volver a organizar los Juegos Olímpicos modernos, que se gestaron en París, y en 1896 se realizaron en Atenas, y luego en París en 1900. Pero estamos en París 2024. Es la ceremonia de clausura. Ya se ha cantado el himno griego. Un viajero del pasado hace entrega -al personaje acrobático del futuro- la bandera griega. La izan para que en todo lo alto haga recordar el origen de los juegos hace 2800 años. Hace su aparición la sin cabeza diosa alada, la Samocracia. En las gradas se ven sombras en movimiento, como en la caverna de Platon, de corredores y caballos, a semejanza de los antiguos y legendarios atletas griegos en competencia. 

8. Luego físicamente desde las alturas bajan representaciones de extraterrestres y hacen acrobacias tipo break dance y gimnasia. Todo ello teniendo como base de apoyo a los cinco aros olímpicos en estructura, los cuales fueron levantados para quedar en lo alto del escenario. El performance incluye un piano en vertical con un halo como si fuera cohete biónico. Alan Rush lo toca.  El estilo Hollyhood ya había entrado al ambiente del espectáculo parisino desde la inauguración. Pero era necesario, según los organizadores, darle más connotación y espectacularidad. De pronto se mira bajar a Tom Cruise, el actor estadounidense de películas de acciones increíbles, colgado de un arnés. Y arriva para recibir la bandera de los Juegos Olímpicos y, de película, trasladarla a California, luego de la salida del estadio en motocicleta, recorrer calles parisinas, subirse a un avión y caer suave con paracaídas en Hollywood, donde construyó nuevamente las famosas letras que identifican a la ciudad meca del cine comercial, para luego entregar dicha bandera y recorrer carreteras y caminos para hacerla llegar e izar en las playas californianas y dar inicio al recibimiento con música a todo buen sonido.

9. No era necesario tal caso. Mas no tan así. Allí vimos a la banda Reed Chillis Pepper, con su famosa canción ochentera  "Californication".  Y también a Billie Eilish: cantante de 22 años que lanzó sus primeros sencillos en 2020. Y vimos a Snoop Dogg, rapero. Hollywood es el orgullo de California, que además de lo espectacular, que ya ni tanto, es casi lo único que tiene que ofrecer al mundo.

10. Nos vemos en LA28. Y nos recibirá algo así como lo que canta la nostálgica banda de Chillis Pepper con su descriptiva canción Californication: " Espías psíquicos de China,/ intentan robar el entusiasmo de tu mente./ Pequeñas chicas de Suecia,/ sueñan con citas de la pantalla de cine./ Y si quieres este tipo de sueños,/ es californicación/ Es el filo del mundo,/ y de toda la civilización occidental./ El sol quizás salga por el Este,/ al menos se quedará en la posición final./ Se entiende que Hollywood/ vende californicación.