El valor de la responsabilidad en las escuelas
Universidad Juárez Autónoma de Tabasco
División Académica de Ciencias Sociales y Humanidades
El Valor de la Responsabilidad en las Escuelas
Antonio Solís Calvillo 232F34002
Materia: Filosofía de la religión/ Maestría en Filosofía Aplicada
Maestro: Dr. Roberto Valencia Aguirre
2 de noviembre de 2024
Introducción
Un director vive en la comunidad donde trabaja. Así que se le hace fácil compartir la jornada laboral entre su casa y la escuela. Un maestro vive en la comunidad y a la hora del recreo va a desayunar a su casa. Un supervisor tiene rancho con ganado, y cuando va a su terreno, aprovecha para visitar, simulando supervisión, las escuelas por donde va pasando. En una escuela telesecundaria acordaron padres de familia, alumnos y maestros, cerrar el portón de entrada a las 8:00 am, y ya no entrarían los que llegaran después. A las 8:00 los maestros estaban afuera. “Los alumnos que no cooperaron para el convivio no van a entrar”. Son pincelazos apenas, de un sistema escolar poco articulado.
Este texto se asoma a la experiencia personal para mostrarla al público. En mi tramo recorrido y escuchado me he encontrado con directores que no se interesan por dirigir, maestros que consideran que su función es enseñar, no inculcar valores, “porque eso corresponde a los padres”. Padres de familia que consideran culpables a los maestros porque sus hijos aprenden poco y mal. Supervisores que no supervisan porque no saben, y en muchos casos ni quieren. Y la institución responsable de la educación, se encuentra perdida en la inercia del burocratismo, para decirlo de manera suave.
Si bien es cierto que generalizar no es justo, es bien sabido que todo esto existe. Y que parece utópico pensar que las cosas puedan mejorar.
Admito que hace años consideré posible la mejora del sistema educativo en su conjunto, pero esto me generó ansiedad y estrés. Afortunadamente muy pronto me di cuenta que cada quien tiene su parte, y acotado el espacio de influencia personal, a eso debemos dedicar los mejores esfuerzos: el maestro dentro del aula; el director en la escuela, el supervisor en su zona, los padres en su casa y en diálogo con los docentes de sus hijos, y la institución -llamada Secretaría- a visionar a futuro, para liderar a todo el ejercito de tarbajadors de la educación, y no quedarse en la inercia del dejar pasar y dejar hacer. La institución tiene la responsabilidad colectiva.
En este texto abordaré de manera muy general un solo valor al que considero básico, fundamental o de primera generación. Me referiré a la responsabilidad. Pero antes de cerrar la introducción planteo la pregunta ¿y qué tiene qué ver la Filosofía en todo esto?, y esbozo una respuesta: La filosofía no es ajena a ninguna actividad humana. Por derecho propio se ha ganado su espacio como matriarca de todas las ciencias. Sobretodo porque conduce las reflexiones de las distintas materias en función de la aplicación de cada una de ellas para lograr mejores condiciones de vida y cuidado de la naturaleza.
La Filosofía en el campo educativo
El pensamiento humano, como lo muestra la historia de las ideas, ha centrado sus reflexiones en torno a las conocidas preguntas básicas sobre nuestor origen y destino, el sentido de la vida, lo que hay después de la muerte, si algo hay. Divinas o terrenales respuestas, el hombre se ha regido por ellas, para normar su conducta en lo cotidiano. En ese sentido la ética es la rama de la filosofía en la que se reflexiona sobre los valores, aceptados como universales, comunes a todos, que permiten una mejor convencia. Valores y conocimientos es la esencia donde se organizan las actividades escolares.
La educación pública y los libros de texto gratuitos
La cosmovisión en nuestro país se ha construido principalmente por la educación pública. La gran mayoría de mexicanos estudiamos gracias a ella. Luego de la revolución iniciada en 1910, y concretizada en la Constitución de 1917, destacando el artículo 3º, que garantiza el derecho a la educación, se inició una verdadera cruzada contra el analfabetismo, el cual favorecía la explotación irracional a los trabajadores del campo y obreros de la ciudad. Y esta educación pública, nacionalista, sin duda tiene como base a los maestros rurales y los libros de texto gratuitos. Se dijo en ese tiempo: para que pueda haber educación laica, gratuita y obligatoria, no basta el edificio con sus bien o regular construidos salones, sino se requiere que los libros sean gratuitos. Para ello se creó la Comisión Nacional de los libros de texto gratuitos en 1959, siendo presidente el Lic. Adolfo López Mateos. Y entonces sí, los más pobres entre los pobres no tienen pretextos, al menos para adquirir la educación básica.
Cabe destacar asimismo que el contenido de los libros gratuitos tienen una intencionalidad, lo que dijéramos ahora "una narrativa". Y en ellos van explícitos e implicitos, los valores.
Los valores en la escuela
Todo el sistema educativo mexicano lo conforman casi 240 mil escuelas en los niveles de preescolar, primaria y secundaria. A todas ellas acuden millones de alumnos y miles de maestros y directivos. Y cada uno con las ideas sobre lo que debe ser el comportamiento personal, con los valores inculcados en casa a través del ejemplo de los padres, pero sobretodo moldeados por la sociedad. Los valores como el deber ser, lo cual es confrontado con la realidad en cada uno de los planteles, que son los micro universos.
En lo concreto en este texto me refiero al valor de la responsabilidad de todos los integrantes de una comunidad educativa. Entre asistencia y puntualidad. Entre el querer aprender, pero también el querer enseñar. Entre ser congruente con el decir y el hacer. En la actualización permanente, dadas las dificultades actuales con tantas distracciones. Hago un paréntesis: Zigmunt Bauman, en el libro “Sobre la educación en un mundo líquido”, plantea mediante la metáfora del arquero, arco, flecha y blanco, que este último es móvil, entonces el arquero tiene que lanzar una flecha igualmente móvil para seguir el movimiento del blanco. Así el alumno, con las tantas distracciones y preocupaciones por sus problemas personales, su pensamiento no está fijo. El conocimiento sería la flecha, el alumno, el blanco.
Este es el motivo fuerte de la necesidad de la actualización permanente de los docentes.
El Bien y el Mal, la pugna
La historia de la humanidad nos muestra la pugna del bien y del mal. Pero no es tan así tan esquemático de dos polos. Hay infinidad de matices, algunos de ellos contradictorios, lo que en un extremo se considera bueno, en el otro se considera malo. Así que esa no sería la ruta simple por seguir. Sino que sería conveniente tomar con pinzas esos dos conceptos, y enfocarnos a lo que sucede en las escuelas.
Cada docente tiene una idea de lo que es bueno y lo que es malo. Pero lo hace en función de lo que él aprendió en casa y lo que la sociedad le ha dicho lo que es el deber ser. Solo que no mira sobre sobre su propia conducta en la escuela, sino que juzga en función de lo que manifiestan en conducta los demás, sean alumnos o sus propios compañeros.
Entonces todo ello va a determinar lo que intente o trate de regular lo que sucede en su grupo. Pero tiene un ideal: que todos los estudiantes tengan un buen comportamiento basado en valores: responsables, colaborativos, tranquilos, solidarios, paíficos, con higiene, disponibles a cumplir con las actividades por realizar y cumplimiento de tareas.
Pero no es así. Utilizando una regla de tercios, se puede afirmar que el 33 por ciento de alumnos son responsables con sus deberes, otro 33 por ciento son regulares; y está presente asimismo el 33 por ciento que manifiestan indisciplina y no interesarse ni por poner atención y menos cumplir con las tareas.
La verdadera tarea, a manera de reto ético, de los maestros es precisamente con este último tercio. Bajo la idea de que si no los liderean en la casa, y en la escuela los docentes tampoco, bajo la peregrina idea que los valores vienen de casa y que en la escuela solo se transmiten conocimientos, entocnes los van a liderear en el barrio, y puede que realicen esa tarea los que relizan actividades fuera de la ley.
¿Qué nos dice la Filosofía al respecto del Bien y del Mal?
La humanidad ha debatido desde el principio sobre estos dos conceptos. De manera sintética expongo algunas ideas al respecto:
Para Platón el “bien” es la fuente de todo lo que existe. Y en contraposicion, el mal es la ausencia del bien. Aristóteles considera al bien como la realización de la virtud y la felicidad, y el mal, lo contrario. Emannuel Kant considera al bien como la acción moral que se realiza por deber y no por interés. En cambio el rebelde Fiedrich Niezsche critica los conceptos tal y como se manejan en su tiempo, y considera que han sido creados dichos conceptos por la sociedad para el control de los individuos.
Para los existencialistas Jean Paul Sartre, y Martin Heidegguer, los conceptos no son absolutos en sí mismos, sino tienen que ver con la elección que hace el individuo para su comportamiento. Para los relativistas, su mismo nombre lo indica: el bien y el mal dependen del tiempo, la cultura y la sociedad en la que se apliquen. Ello a contraposición de los absolutistas, quienes consideran que son conceptos eminentemente absolutos, inamovibles, que están más allá del tiempo, y de la cultura.
Nuestra sociedad actual
Podemos hacer una lista larga de las conductas individuales y colectivas que se van imponiendo. Todas ellas bajo el manto interesado del egoismo y el individualismo. Todas ellas motivadas por el querer tener más. Todas ellas englobadas en una estrategia del poder trasnacional por reforzar el consumismo. Sumado a eso, con el fin de reforzar esa conducta de vivir para consumir, a la sociedad actual se le considera como sociedad del espectáculo, como bien lo señala Guy Debord, quien afirma que la realidad se ha convertido en una representación, un espectáculo que oculta la verdadera nturaleza de las relaciones sociales y la alienaciçon. Todo es mercantil, el hombre mismo. Así el país -y no solo nuestro país, sino la humanidad entera- parece ir en ruta hacia una descomposición mayor, perdido el centro de la familia como agrupación central de ayuda colectiva, nucleo de la humanidad. Esta descomposición tiene muchos factores, entre ellos: los bajos salarios y el desempleo; la desigual distribución de la riqueza, las cada vez menos oportunidades de desarrollo personal, y muchos otros factores. Todas esas actitudes de comportamiento en la sociedad, se reflejan en la escuela, en cada uno de los niños que llegan al salón de clases. Y se encuentran en un ambiente donde no se sienten a gusto, porque se trata de enseñar algo que a ellos no les interesa. Y de la misma manera el docente puede considerar que si a los alumnos no les interesa, menos a ellos. En lugar de asumir -el docente- una posición de resistencia, y procurar personamente actualizaciones que le permitan hacer las clases más interesantes, con el fin de que pueda despertar interés en los alumnos.
Los valores en los libros de texto
Cierto que el asunto del comportamiento de las personas, alumnos, docentes, directivos y persona de apoyo, que asisten a un centro escolar no es tan sencillo. Podemos hablar de manera insistente sobre valores. Peor mientras no asumamos con conciencia cada quien nuestro papel en la educación, los avances y cambios no serán posible. Hasta parece que vamos en retroceso.
A continuación presento una lista sobre los temas realaionados con la ética, que vienen en los libros de texto gratuitos, de la Nueva Escuela mexicana, en el marco de lo que se ha dado a llamar “Humanismo mexicano”.
Grado 6º | Tema | Página |
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| Buen vivir y cuidado | 142 |
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| Discriminación, violencia y diversidades | 143 |
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| Principios éticos | 177 |
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| Convivencia | 178 |
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| Cultura de paz y conflictos sociales | 153 |
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| Comunidad | 190 |
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| Discriminación | 191 |
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| Diversidad cultural | 193 |
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| Estereotipos de género | 194 |
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| Roles de género | 196 |
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| Formación para la vida | 199 |
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| Redes sociales | 202 |
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| Inclusión | 216 |
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| Respeto | 218 |
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| Solidaridad | 220 |
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| Tolerancia | 222 |
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| Valores | 226 |
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| Conciencia | 230 |
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| Convivencia pacífica | 232 |
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| Derechos de los niños y niñas | 233 |
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| Emociones | 235 |
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| Toma de decisiones | 236 |
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| Acuerdos | 239 |
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| Beneficio social | 244 |
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| Consenso | 246 |
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| Resolución de problemas | 248 |
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5º |
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| Ética y Filosofía | 146 |
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| Ecocidio y Ética medioambiental | 149 |
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| Los valores | 194 |
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| Los conflictos surgidos en la escuela y casa | 195 |
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| Alternativas de solución | 196 |
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| Las posibles alternativas de solución ante problemas | 247 |
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4º |
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| Solidaridad | 160 |
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| Discriminación | 164 |
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| Respeto a las diversidades | 166 |
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| Trato digno | 168 |
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| Toma de decisiones éticas | 172 |
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| Ética ambiental | 176 | Cultura capitalista Consumismo, Deterioro de la cultura capitalista, soberanía alimentaria y cultura sustentable |
| Conflictos interculturales y democracia participativa | 184 |
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| La escucha | 194 |
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| Entendimiento mutuo | 196 |
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| Negociación | 197 |
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| Toma de decisiones | 199 |
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| Convivencia | 200 |
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| Situaciones injustas | 203 |
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3º |
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| Toma de decisiones | 186 | Decisión, autocuidado, riesgo, dignidad, criterio, valoración |
| Convivencia | 198 |
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| Colaboración | 202 |
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| Inclusión | 204 |
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| Valores | 208 |
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| Normas y reglas de convivencia | 209 |
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| Sentido de pertenencia | 213 |
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2º | Persona moral | 160 |
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| Valor moral | 160 |
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| Dignidad | 160 |
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| Igualdad | 161 |
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| Problemas morales | 161 |
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| Decisiones | 169 |
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| Responsabilidad, individual y colectiva | 170 |
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| Conflictos, diálogo, cultura de paz | 175 |
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| Reglas y sanción | 177 |
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| Convivencia | 232 |
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| Toma de decisiones | 236 |
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| Acuerdo | 240 |
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|
1º |
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| Resolución de conflictos | 132 |
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| La responsabilidad en la toma de decisiones | 144 |
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| Los reglamentos | 182 |
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| Convivencia pacífica (Las emociones) |
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Haciendo esta revisión rápida a los libros de texto, puedo afirmar que el problema no son estos, porque efectivamente incluyen diversos temas relacionados con los valores. Pero vayamos un poco más llá. ¿Hemos escuchado la expresión que "la historia la escriben los vencedores”? Pues no solo la historia, sino las reglas cívicas; los valores a seguir; la lengua por hablar; la creencia por imponer; las leyendas por resaltar; los héroes en quiénes creer; la verdad histórica por imponer. Es decir: lo que nuestros niños deben de aprender de acuerdo a quienes manejan el estado. Una política de colonización cerebral, diría Don Enrique Dusell. Ese es el contenido de nuestros libros.
Conclusiones
· Las valores valen, dijo Max Scheler. Son vacíos si solo se les toma como conceptos a los que hay que aprender y ponerlos en práctica. Me parece poco importante que se escoja un valor, por ejemplo, el de la responsabilidad, y no se autoreflexione sobre los actos personales.
· Los valores y su promoción son responsabilidad de todos. Escuelas, medios de comunicación, autoridades, templos, organizaciones civiles, etc. El comportamiento de los individuos en la escuela solo refleja a la sociedad y sus contradicciones. Ese “dile que no estoy”. Esos kilos de 900 gramos. Esa promesa incumplida. Esa simulación en las autoridades. Ese diferencia entre el decir y el hacer. Lo refleja la escuela, y contra todo ello lucha, mas no es una estrategia general de la sociedad..
· Hay quienes se escudan en no cumplir porque los demás no cumplen, a manera de justificación. Cada quien tenemos nuestro espacio de responsabilidad para poner la muestra: los padres, los maestros, los líderes sociales, las autoridades.
· Empezando por la responsabilidad, pero hay otros temas algo complejos para tratar por parte de los maestros, a causa de la idiosincracia y tabúes que tenemos en general, como son sexualidad y género, reproducción, derecho a decidir sobre el cuerpo, el libre albedrío de creer o no creer en una divinidad, la existencia de vida extraterrestre, y otros más.
· La sociedad enseña a golpe de realidad. El adolescente se encuentra con dos realidades distintas y a veces contradictorias: la poco que se enseña en la escuela y la mucho que se enseña fuera de ella. Y muchas veces se contraponen o pocas veces coinciden.
· Hay quienes promueven la desesperanza. Los maestros tienen el deber ético de reflexionar la realidad junto con sus alumnos. Pero no promover la desesperanza. Tampoco la resignación.
Bibliografía
Platón, “La república o El Estado”. Editorial Austral. Madrid, 2009
Hirschberger, “Historia de la filosofía. Vol I y II. Barcelona, 2014, Edición digital.
Bauman, Zigmunt. “Sobre la educación en un mundo líquido”. Editorial Paidós. Madrid. 2012.
Debor, Guy, “La sociedad del espectáculo”, Editorial Pre textos. Valencia, 2005
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