Del fuego y otros menesteres

1. ¿Y qué es aquella luz resplandeciente? "Fuego". ¿Y la de más allá? "Es fuego". ¿Y aquella otra? "Fuego, es fuego". Era una belleza el espectáculo para pirómanos. ¿No será el fin del mundo? "No, en todo caso será el principio del mundo."

2. Miro un rostro. En él miro a todos los rostros que existen y existieron. De nada sirven ni ayudan las diferencias. Un limitado conjunto de rasgos llevan nombres y apellidos. Y al universo nada importa todas esas convencionales y parafernalia social.

3. Más allá de los acercamientos importan los alejamientos. Al ristre del nunca más y gritos destempleados. Lo ideal son los silencios o en todo caso las cartas al mar.

4. La pájara sigue arriba del árbol. Y canta. Cada nota es raspador en la garganta. ¿Qué te tomas?  Es que tosca y tosco. Y ella: "un whisky con sal".  "¿Quéeee?", sorprendido preguntó el mesero a punto de la esquizofrenia.

5. Yo mismo me veo a través de mí. La mirada viene siendo la interpretación de la luz.

6. Cada par de ojos es una incertidumbre. Imagino al par de ojos de la señora coneja. El par del búho. Y de la vaca. Así puedo imaginar la incertidumbre de todas las especies. "No, la incertidumbre es exclusiva del ser humano", respondió el maestro.

7. "Yo puedo imaginar lo que no existe. De eso trata esta aventura", dije no muy convencido. Ella captó la duda. Captó al fin el juego de palabras. "Excepto tú y yo, nadie más existimos". Dijo ella solemne y angustiada.

8. Viajaban dando vueltas en la tierra. El giro fue siempre circular. "Ya quiero bajarme", dijo. ¿Él o ella? Qué importa. Ambos querían bajarse, solo que uno lo dijo, convencido que ese circular es un sin sentido. Se refería a sus pláticas de siempre. No encontraron la manera de bajarse.

9. ¿Bajarse a dónde? Si eran material del mismo armatoste en marcha. ¿Cuándo empezó todo? No lo sabían, ni lo sabrán. Solo que algunos ni eso se preguntan. Porque no saben de la existencia misma. ¿Y si lo saben cambia algo?

10. ¿Y cuánto es mucho tiempo?, preguntó. Alguien quiso responderle que mucho eran millones de años, pero en su memoria no estaba esa imagen. Fue entonces que se hizo el silencio. Y empezó todo de nuevo.