Día mundial contra la corrupción

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Día mundial contra la corrupción
1. Lucha y combate cuerpo a cuerpo contra la corrupción. Diciembre 9, Día mundial contra ese flagelo social; para recordárnoslo, para ponerlo en nuestro frente. La corrupción como tema es complejo, por las tantas aristas y conexiones que tiene, por las tantas cadenas de complicidad. Sin embargo siempre valdrá la pena reflexionarlo, ponerlo en la mesa de las discusiones, sobretodo desde la perspectiva del espejo, recurriendo a la historia y a la filosofía. ¿Qué ha pasado con este tema desde los orígenes? ¿pero cuáles son los orígenes? ¿Y cómo reconocer la verdad del origen? ¿Origen de qué? Pero considerando una versión mítica de los orígenes como la de Adán y Eva y la manzana ofrecida por ella al ingenuo Adán. ¿"Por qué has comido de ese fruto prohibido?, le habría recriminado Dios al hombre? "Fue ella la que me ofreció? Y cuando Caín a Abel asesina, y responde que "¿acaso es mi obligación cuidarlo?", a la pregunta sobre las andanzas de su hermano. Y ¿cuando a Jesús y a Sócrates condenan siendo inocente? La respuesta es por la corrupción.
2. Con una conferencia impartida por el Dr. Roberto Valencia Aguirre, mejor conocido como el Padre Beto Valencia, la Secretaría de la Función Pública celebró el Día mundial contra la Corrupción, en el auditorio de la SEDEC. Ante el pequeño auditorio lleno, Beto valencia hizo un recorrido religioso y laico sobre el tema. Habló sobre los privilegios de los españoles, que dio origen a la lucha de la Independencia, con los curas Hidalgo y Morelos; de la Iglesia cuando Benito Juárez, que dieron origen a las Leyes de Reforma; cuando la lucha por la revolución mexicana. Y todas esas gestas las unió en una bandera común: la lucha por los privilegios, la lucha contra la corrupción.
3. "Puzza", palabra italiana significa en español apesta. El conferencista Valencia, ya había comentado sobre los cadáveres de los seres vivos. Apestan al descomponerse. Pero de todos ellos, el que produce el olor más repugnante es el del cuerpo humano. ¿Las razones? Quizá por todo tipo de comida que digiere. Carnes, embutidos, chatarra, picante, carne seca, salada, carne cruda con limón, etc. Pero quedémonos con el verbo apestar. La palabra puzza (pronunciación Putsa) causa risa. El mal olor del cuerpo es por la descomposición, llamada corrupción de la carne.
4. He allí la idea hilvanada y relacionada. La corrupción apesta, hiede. La corrupción es la descomposición de la sociedad. Y no nos importa en tanto no acudimos a un hospital y hay mal trato o no hay medicinas. O que los familiares de los enfermos se quedan a la intemperie, sin tener un espacio digno para la espera, que es agravada por la condición del familiar. O que nos enteramos que una persona es asesinada y no hay investigación, no se encuentra a los culpables. O que el expediente que está másabajo en el montón, allí queda, hasta que no haya quien lo suba mediante un monto económico.
5. La corrupción apesta. La corrupción descompone las relaciones en la sociedad. Estamos sentados en un auditorio de instalaciones de Gobierno. Estamos escuchando la plática. No es el sermón en la iglesia. Y aunque así fuera. Es una conferencia-clase. Es una charla que comunica. Es una plática que conecta por el tema y por los asistentes. El tema es común a muchas sociedades y se ha comentado hasta el cansancio. Se han emprendido luchas contra la corrupción desde el discurso. Y es un tema siempre vigente, porque lacera, daña, debilita, degrada. Porque sentimos que no es de nuestra incumbencia... hasta que somos los afectados.
6. La charla es amena. Los asistentes están atentos. El tema nos incumbe a todos. Es el Día mundial contra la corrupción. Es personal de la Función Publica quienes escuchan. Más allá de discursos. Más allá de estadísticas. Más allá de los países que ocupan los primeros y los últimos lugares, sea en menos o más corrupción. Y sin duda más allá e las comparaciones. Y aun más allá de leyes y más leyes que en la palabra las combaten, se hace necesario reflexionar sobre ¿qué podemos hacer en lo concreto cada uno de los individuos? ¿Nace el hombre corrupto o se hace en el contexto en el que vive? ¿La indiferencia ante los asuntos públicos es una de las causas? Yo me hacia estas preguntas. Y recordaba que gran parte de la sociedad justifica la corrupción.
7. Paréntesis. ¿Gran parte de la sociedad la justifica? Así es. Cuando llegaba yo a reuniones en comunidades planteaba dos temas. ¿Qué es ser ciudadano? Y cómo es que la corrupción la justifica gran parte de la población. En el primer concepto explicaba que ciudadano es aquel que se interesa por los asuntos públicos, el que suma su esfuerzo y tiempo por mejorar las condiciones de su comunidad: escuela, centro de salud, parques, caminos; ciudadano es el que no tira basura, el que limpia el frente de su casa. Que el cumplir 18 años no nos hace ciudadanos. Esa credencial del INI solo hace constar que somos responsables de los actos que hagamos.
8. Y reían cuando yo decía las expresiones que muchas personas utilizan para justificar la corrupción: "robó, pero hizo obra". "Robó, pero salpicó". Pero la más triste es aquella cuando el funcionario o presidente municipal o gobernador sale con las manos limpias, con la misma casa y la misma familia. Entonces quienes lo conocen dicen: "es un tonto, estuvo en el gobierno y vive igual que antes". Hasta ese grado hemos llegado. Solo que cuando somos los afectados, entonces sí reparamos y decimos que los demás son corruptos.
9. Dice Beto Valencia (escribo de memoria): San Ignacio de Loyola, fundador de los Jesuitas, consideraba que es la educación la que puede ir disminuyendo la corrupción, los malos hábitos. Esta educación debe ser con disciplina, organización y evaluación (lo que se llamaba Ratio studiorum). Y sobre la corrupción -refiriéndolo como sinónimo de pecado- decía que "apesta", descompone, corrompe el cuerpo social. Que se forman "redes" que permiten la protección de unos corruptos con otros, porque tienen el mismo destino, y la red permite impunidad. Y las cadenas, cuyos eslabones parecen irrompibles. Parece que no tiene fin. O que no hay manera.
10. El Día mundial de la lucha contra la corrupción (9 de diciembre), es una jornada contra ese flagelo social que amplia las desigualdades sociales, genera disminución de la calidad de los servicios para la población, destruye los vínculos sociales, y frena el desarrollo colectivo. Dicha fecha fue acordada por la Asamblea General de la ONU en 2023. Y se hacen esfuerzos de difusión para que se reflexione mediante conversatorios, conferencias, mesas redondas, programas, etc, sobre dicho mal. En Tabasco, La titular de la Secretaría de la Función Pública, Mileyli María Wilson Arias, enfatizó sobre la importancia de las actividades institucionales, en comunicación permanente con la sociedad, relacionadas con la lucha contra la corrupción. E hizo entrega del reconocimiento al conferencista, Roberto Valencia Aguirre, agradeciéndole su importante y destacada participación con el tema.

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