Río viejo

Me río de este viejo río sin cauce ni agua. Vieja ruta -eso sí- cuando en otros tiempos pasaban palotes, animales muertos y jofainas. Aquí hicieron nido los pájaros. Y las frondas de los árboles  renacen a la mirada, esta que también renace. Sublime sensación de naturaleza viva con explosión del universo. Y este olor a sándalo en las manos donde crece el árbol de las moras. Y estas miradas tiernas donde habitamos como infantes que se refugian en el juego. Yo traje este libro para transitarlo como entre nubes que me ayuda a diseccionar y diseccionarme. El "yo" egoista en mi relación con los otros. Que me ayuda a mirarme en el espejo para luego romperlo; espejo de la nada. Una mariposa al beso estupefacta se estrella en el parabrisas. Me digo que soy yo mismo dando pasos de ciego intentando rondar la felicidad eterna.  Nada significan estas palabras para distraer el hambre y la sed de ti. Las palabras como discurso se animan a saltar donde durante y donde termina el camino. Ven; vamos. Nuestro destino es cruzar juntos el río viejo donde nada hay. Solo nuestros silencios, nuestras manos. Divisamos  al fin juntos la llegada al valle. Este.

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