Despistado

1. Soy despistado para leer. Entro al reino de las primeras páginas de un libro. Y veo que otro libro tiene las páginas abiertas. Y dejo el que había empezado para estar con otro. Y no porque uno me guste más que el otro. Solo que ejerzo mi derecho de leer o no leer, de saltarme páginas, de empezar de atrás hacia adelante. Así dice Daniel Penac en su breve texto de los derechos del lector.

2. Soy despistado para leer, también en otras cosas. Por ejemplo: cuando cumpleaños me llegan textos de felicitación. Y en lugar de responder al instante, me digo: "mañana contestas con calma, un texto breve pero bien escrito; a la carrera nada sale bien". Y así procedo a esperar el mañana. Solo que me ocupo de otras cosas y así se me van los días. Ya a los dos meses, considero que ya es demasiado tarde, y dejo las cosas así. No es porque no quiera, sino por despistado. Porque cargo la culpa de ello todo el año.

3. Me gusta el meme (texto o foto con intención de hacer reír) del despistado que entra al oxxo a comprar un litro de leche, se le olvida a o que iba, y compra un six de cervezas. Creo que no sucede. Lo que sí es que voy por una cerveza y salgo con dos y un litro de leche. Y hay otros que refieren a lo mismo. Lo despistado no se cura, me dice el siquiatra. Le cuento que me compraba una agenda para no olvidarme de las cosas por hacer y se me olvida la agenda en cualquier parte, lo mismo que el paraguas. Por eso no los uso.

4. despistado al grado de dar prestados libros y no me los regresan. Libros que son muy queridos, pero que por despistado los di prestados y no supe ni a quién, ni cuándo, ni dónde. Pero sí me faltan los amadísimos "Carta a D" (una historia de amor), el tomo 2 de "Crimen y castigo"(de Editoral Progreso). Y un "Cancionero Serrat", firmado por el gran Joan Manuel. Despistado, no. Tonto. Y me ven preguntando a los amigos y amigas cercanas si fue a ellos. O si saben a quién. Y nada que aparecen. "Ay, mis libros"

5. Ya he comentado en otras ocasiones que ya casi no compro libros en físico. Sin falsa modestia tengo muchos y entre ellos la mayoría sin leer. Bien podría de allí escoger.  Coger un libro de buen tema y a darle. Sería lo ideal. Solo que me encuentro con recomendaciones que hacen amigos que sí saben, uno de ellos Vicente Gómez, y los busco en la biblioteca digital de Telegram, y de allí los tomo, como tomar el aire del ambiente (gratis). O los busco en otras áreas de la red mundial, y las más de las veces lo obtengo. 

6. Otra ocasión iba a mi Matamoros, pero solo me alcanzaba para un boleto de avión. Mi estancia sería de un mes y el regreso lo haría en autobús. Peor me distraje al momento de hacer el trámite por internet, y al imprimirlo, me di cuenta que era de regreso, y para dos días después.

7. Para despistados como yo es que te piden confirmar. Te subrayan fecha, hora y destino en los boletos. Te llaman de los bancos por si olvidaste tu fecha de corte y de límite de pago. Cuando voy a cargar gasolina me aseguro que nos ea la bomba de diesel. Y con la roja y la verde tienen distintos nombres según la empresa que la vende, mejor merendero a los colores. Verde o roja. Y solo a veces en conjunción de verde y roja.

8. Despistada la señora que se quedó dentro de Modatels en la balacera. O la madre que dejó olvidado a su hijo de seis años en la combi, y solo regresó asustada antes que el vehículo se moviera para preguntar por si había olvidado el celular. Y casualmente este lo tenía su hijo.

9. despistado que soy, en mis trayectos en carretera en los que "no hay" pierde por ser de sur a norte y viceversa, com carreteras y señales claras, en una ocasión ya andaba por Loma Bonita, Oaxaca, nada que ver con mi ruta. A veces llego a un café y pido un capuchino y se me olvida pedir los leche deslactosada. Y cuando me lo sirven y lo empiezo a tomar, de inmediato mi cuerpo reacciona poniéndose verde y empiezo a sudar frío y luego a vomitar, lo cual me da pena.

10. Por eso mejor me amarro un hilo en el dedo gordo de mi mano izquierda, y al momento de tomar una decisión sobre algo, miro mi mano, y en el dedo y el hilo, y tengo más elementos para decidir, solo que a veces se me olvida también la razón por la que tengo ese hilo en la mano. Ya ni se diga cuando mando correo equivocados con destinatarios que no conozco, o cuando amanezco en otras ciudades, otras habitaciones de casa. Y entonces sí se arma. Y nada, que es por el despiste. Y hast he mandado hacer mi placa al cuello con las letras de "el portador de la presente es despistado". Y algunas ya vienen con gps que ayuda para localizar a donde voy o a donde vengo.

11. pero decía aparte de lo despistado, sobre los libros. Ahorita tengo cinco empezados, uno de ellos es la "Soy Isaac", de Isaac Assimov. Otro es el Poesía y obra completa, de Ricardo Cadenas. Otro es el gordo "Ideas"