Peces de ciudad

Peces de ciudad

1. A veces, cuando pienso en los peces abisales,  pienso en lo que miro cuando camino por el centro de la ciudad. Me siento en una banca y miro. Solo miro.

2. Cuando terminé la estancia anterior, la reconsidero. Considero que debí escribir: creo mirar. Porque a fin de cuentas es una percepción a través de la vista, a través del sesgo del pensamiento.

3. Como casi todos saben, pez abisal es la especie ciega que habita en el fondo del mar, a donde no llega la luz. Y él sí, realmente, se mueve como "pez" en el agua.

4. Se dice asimismo que el murciélago es ciego, y que para ubicarse en el espacio se vale de la autoemisión de sonido, que al rebotar y regresar a él, le permite calcular distancias y evadir obstáculos.

5. Conozco personas fisicamente ciegas o sordas, que perfectamente se mueven, porque aprendieron a fuerza de la necesidad. Otro sentido ayuda a suplir la ausencia. La naturaleza es tan sabia.

6. Cuando la escuela Normal, a la que llegué de 15 a 19 años, para maestro de primaria, el maestro Vicente Cebada nos decía que "la naturaleza es tan sabia, que hasta los niños con pésimos maestros, aprenden". 

7. El caos es lo natural (dice Karl Popper). El verdadero orden de la naturaleza es el caos continuo. Solo el ser humano tiene en su cabeza la necesidad del orden. Y se desespera por ordenar el natural caos. Este concepto rompe con paradigmas con los que crecimos. Otro: de las crisis nacen las mejores ideas. 

8. En relación a los peces abisales, volviendo a la idea (mientras tomo café, mientras agradezco despertar este domingo), es un adaptarse al medio. Se mira en la condición de luz. Si no la hay, el sentido de la vista tiene otra función.

9. Pero hilando la idea: el conocimiento está relacionado metafóricamente con la luz. Lo contrario, la falta de conocimiento se relaciona con oscuridad. Sí, como la del fondo del mar donde no llega la luz, y viven de manera normal los peces abisales.

10. Algo así en la sociedad. Peces abisales en la ciudad. Impera la oscuridad. La irracionalidad. La falta de luz. La falta de lógica. Así andamos. En queja permanente de que no hay orden, de que no hay paz, de que hay problemas económicos. Llanto, queja y lamento. 

11. Volvamos a Popper: el caos es lo natural, aunque soñemos con el orden; el orden solo está en la mente humana. El caos es la naturaleza misma. 

12. Repasemos la Caverna de Platón: vivimos de espaldas a la entrada de la caverna. Afuera está la luz. Dentro, la oscuridad, donde nos movemos como esos peces abisales. En esa oscuridad es donde se reflejan las imágenes. Y creemos que es la realidad. Así los peces abisales en el fondo del amr y en la ciudad. 

13. Los que tengan linterna para alumbrarse podrán ver. Aunque recordemos que los peces abisales -considero que- no saben que no ven. Cierto, también entre los abisales hay pez linterna. Suena bien.