La rueda de la fortuna

Que barbaridad, sin ton ni son, se presentan estos niños. Nunca los he descrito, ella es una niña flaquita, de mirada encantadora. "Como una lombriz", ella misma lo dice. Y él es moreno claro y risueño. Con una ceja muy junta. Y ahora dicen que la maestra les cambió la ruta de conceptos, ahora la tarea es investigar sobre los juegos de feria, algo así como la memoria de los viejos que recuerdan.  Y me ponen a platicar sobre "qué recuerda usted, de las ferias de colonia". "Cuando niño, entre los montes azules, se instalaban los gitanos, con una ruedita de la fortuna y los caballitos en giro. Y el tiro con carabina. Emocionante, por demás. Yo subía a la rueda. Solo el estar a punto, ya en la fila, del subir, para ver desde lo alto, la colonia y el porvenir. Mas la bajada el vértigo, la emoción. Y mirar a los otros estando arriba, viéndolos hacia abajo, y estando abajo, viendo a los de arriba, con cierto apremio, porque se siguiera moviendo en cinco o diez vueltas, por dos pesos, de ese entonces. En fin que termina el tiempo del boleto. Y a bajarnos. Pero me queda la imagen de la rueda mencionada, estar arriba y estar abajo, la diferencia en el impacto en uno. Que emoción, que me recuerden estos temas. Y a la maestra le envío una carta de agradecimiento, y este texto, para ver si le gusta, como si fuera diploma".

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