Bolero

Desde aquel día escucho las canciones de siempre. Como notas sibilinas que quedan al alcance para recordar la brasa que va quedando en cenizas. Desde aquel día la radio marca otra ruta que nada tiene que ver conmigo. Una canción apenas que habla de olvidos y recuerdos. Una sombra crece alimentada con pétalos marchitos. Pero todo bien en ese caso, al verte feliz en el camino como aquella vez, al paso de las flores. Desde aquel día el dulce de la vida queda sin sabores. Y los pájaros que cantaban más no están. Yo sigo esperando que la nube me lleve en sueños a escuchar de nuevo las canciones de moda que invitaban al mover los pies debajo de la mesa. Aunque se que el libro de la vida no está a nuestro alcance más. Canta mi corazón bolero. Hielo y sombras. Pero el día está aquí de nuevo. Y a sonreír.

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