In memoriam: chévere, Armando Rey

1. "Que atienda a un sicólogo colombiano que quiere hablar con el Secretario, que trae un proyecto para educación básica". Así me dijo mi diligente Marybell, la ejecutiva de la oficina. Era Armando Rey, quien tenía una empresa editorial, y que viajaba por todo el país llevando conferencias gratuitas para maestros. Platicamos largo y tendido, como si nos conociéramos desde antes, y a su propuesta le dije que sí inmediatamente. Y a los pocos días ya estábamos planeando unos talleres, que no recuerdo cómo le llamábamos pero tenían que ver con el manejo de las emociones.

2. Armando falleció antier. Su esposa lo comentó en la página del face de él. De hecho había estado gravemente enfermo hace como cinco meses. Y poco después lo vi recuperado. Me daba la idea que ya había librado el mal momento en su salud, pero no. Y me encontré de pronto con la noticia de su muerte, lamentable.

3. Lo comenté con Federico Mapen Can. Ambos habíamos hecho amistad con él. Aparte de las capacitaciones nos reuníamos por la tarde cuando estaba en Villahermosa. Y echábamos a volar nuestra plática, como toda plática de café, componiendo el mundo y saboreando el café, un pan o las atenciones de las meseras. Lo recuerdo siempre sonriente, siempre animoso y animando. No daba concejos. Comentaba de sus experiencias.

4. Cuando estoy platicando con alguien que me cuenta de sus cuitas. Y que alguien le ha ofendido sobremanera, saco el tema del perdón. Debemos perdonar para alcanzar paz, digo. Y cuento lo que nos contó Armando en una de sus varias sesiones de capacitación. Una señora como de 40 años llegó a consulta. La conclusión luego de la plática es que odiaba a su papá. Y tenía razones fundadas. Desde que estaba ella en el vientre, el padre esperaba varón. Nació mujer y se decepcionó. Y toda la niñez y la  adolescencia se lo reiteraba. Hombre hubiera nacido, no mujer. Y esas expresiones misóginas y machistas le taladraban y herían. Odiaba desde niña a su papá.

5. Entonces que sintió la necesidad de consultar a un sicólogo y fue con Armando, quien luego de escucharla le dijo mirándola fijamente a los ojos:"Debes pedir perdón a tu papá". Tan pronto escuchó ese planteamiento, como que creyó no escuchar. Sorprendida dijo: "¿Que yo le pida perdón?" Armando rey se lo repitió: "Debes buscar y pedirle perdón a tu papá. Ella no podía creer lo que estaba escuchando. "Pedirle perdón, si es al contrario. Él fue el que me hizo daño; no yo. Él es el que debe pedirme perdón".

6. Total que la convenció. Le dijo que debía pedirle perdón diciéndole: "perdóname papá por no haber comprendido tu forma de pensar, de querer varón y no mujer en mi nacimiento".  Con cierta reticencia ella quedó convencida. Fue, contó después. Tan pronto el papa abrió la puerta, se sorprendió al verla. Ella le dijo a qué iba. Él la escuchó incrédulo. Se abrazaron llorando ambos. ¡Tanto tiempo perdido!. Y posteriormente quizá no lo quería, pero ya no lo odiaba. Lo visitaba cada que podía. Y tomaban café y platicaban largo y tendido. La señora regresó y le contó todo eso al doctor. Y había recuperado la calma interior que todos necesitamos.

7. Nos ayudó en la Secretaría de Efucació de Tabasco,dando capacitación en varios municipios, a grupos de maestros. Yo estuve en alguna de ellas. Se hacía buen ambiente con los temas..sobretodo a aprender a no perder la calma en los grupos, a mediar en las diferencias, a desarrollar habilidades para resolver conflictos. También a valorarnos como personas y docentes. Él a cambio ofreció de sus libros y consultas.

8. Una tarde de domingo, el maestro Mapen y Marlén, su esposa, nos invitaron a unas carnes asadas.  "Se van a preparar chévere al estilo Colombia", dijo él. Y así fue. En lugar de sazonarlas, solo se les puso sal del Himalaya. Buenos cortes compramos. Refrescos naturales y de cebada. Cebollino cambray. Yo llevécomo siempre mi linda guitarra, que me.acompaña.a donde sea. Y entre varias canciones llevaba mi repertorio ballenato. Matilde Lina, El viajecito. La ramito de Matimbá. Ellos, Armando y esposa, encantados.

9. "Chévere que se haya aprendido esas canciones para agasajarnos", dijo Armando. Le comenté que no. Que me las sé desde la secundaria porque un grupo tropical de.mi barrio en Matamoros las tocaba. Y luego supe que eran de la tradición colombiana. "Entonces mayor valor tiene. Chévere", dijo. Y seguimos el ambiente.

10. Ahora me entero que ha trascendido a otro plano. Decimos que a la vida eterna. Nuestro agradecimiento a Armando y esposa. Vive él ahora en nuestra memoria y corazón. "Chévere", Armando Rey.

PD.

Villahermosa, Tab; a 20 de noviembre de 2018

Dr. Armando Rey Sánchez

Presidente del Grupo Internacional Humanista

Presente

A nombre de la Secretaría de Educación de Tabasco, le agradezco a usted, Dr. Armando Rey y al Grupo Humanista, por el conjunto de conferencias y talleres sobre salud mental, financiadas por su grupo que, en conjunto, fueron 57 (Cincuenta y siete) conferencias, con una asistencia de 6800 (seis mil ochocientas) figuras educativas entre directivos, docentes y administrativos. Lo anterior representa una fuerte inversión en el personal  que interactúa a diario con niños y jóvenes en formación, cuya dicha formación requiere, junto con los conocimientos del Plan y Programas de Estudios, la construcción de seres humanos física y emocionalmente sanos.

A nuestra sociedad le urge la formación de ciudadanos críticos y reflexivos; pero sobre todo con tranquilidad interior que les permita el disfrute pleno de su vida. Y el loable trabajo realizado por ustedes como humanistas a ello contribuye sin duda alguna. 

Necesitamos heredar a las futuras generaciones un mundo con mayor sentido humano.

Siempre cuente usted con nuestro agradecimiento institucional y personal y considere a nuestras tierra y agua como lugar propio, de usted y de los integrantes del Grupo Humanista. 

Atentamente, por un mundo mejor.

Lic. Antonio Solís Calvillo 

Subsecretario de Educación Básica en Tabasco.