Semblanza de Alberto Pérez Mendoza
Este concurso de oratoria lleva el nombre de Alberto Pérez Mendoza. En su memoria, el “Movimiento Democrático 19 de enero” rinde homenaje a uno de los tabasqueños que supo honrar la existencia humana, con valores que se inculcan en la familia y que se fortalecen desde la conciencia: la amistad y la lealtad, entre otros. Fue uno de los amigos más leales a Andrés Manuel López Obrador, ex presidente de México.
La literatura nos ha dejado pares que están arraigados en la memoria de las generaciones, podemos hablar del par de El ingenioso Quijote y Sancho, de Cervantes; o del par de Santiago el fatalista y su amo, de Diderot. En ambos ejemplos, amo y escudero. Solo que en esta ocasión, hablando de Alberto Pérez Mendoza y AMLO, no podríamos diferenciar, por las características en sus personalidades y valores de ambos, quién era uno y quién el otro.
Originario de familia del esfuerzo, Alberto Pérez Mendoza nació en Villahermosa Tabasco, y estudió la carrera de Derecho en la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco. Fue un excelente periodista, jefe de prensa de Lopez Obrador y fundador y primer director del diario la Verdad del Sureste, diario que dio voz a la oposición política en Tabasco, en esos años de represión, cuando había un férreo control de la prensa.
Era uno de los pocos (de los muy pocos) que Amlo escuchaba. Era muy prudente para dar su opinión. Y de los que sabían cuando callar y cuando hablar. Como buen periodista, sabía el valor tanto de la palabra, como del silencio.
Alberto siempre fue muy estimado por todos. Sabía decir las cosas para motivar y corregir. Sabía sumar la voluntad de las personas. Tenía tacto para tratar los temas.
Pérez Mendoza fue del círculo cercano de Amlo, de las mayores confianzas. Cuando Amlo fue jefe de Gobierno del Distrito federal, Alberto fue su colaborador con el cargo de Director del Patrimonio inmobiliario.
Alberto Pérez Mendoza fue sencillo, vivió en la justa medianía. Ponía mucha atención cuando le hacían algún planteamiento, cuando le sugerían algo. Fue de trato suave, pero firme. Supo sembrar empatía, simpatía y amistad.
Fue fundador del PRD y diputado local de ese partido. Ayudó en la fundación y consolidación de Morena, partido al que coordinó la organización en varios estados del país.
Y como todas las personas que se vuelven leyenda, falleció relativamente joven, a los 55 años de edad, el 13 de marzo de 2013.
Honraremos siempre su memoria.
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