Amanecer domingo de orquídeas

Dos grandes jardines de orquídeas. De ensueño. Cerca uno de otro. Mirada terapia. Éxtasis por  las variadas y parecidas formas de la flor. Lo multicolor. Y en una de ellas me atrevo y cerceno una para ti. La dueña me descubre. Y se acerca. Y digo la razón y tu nombre. "Solo que sea por eso", responde. Y sonríe. Inicia el domingo con el abrir de ojos.

Comentarios

Entradas populares de este blog

lecturas 20. Poemas de Carlos Pellicer Cámara

De cartas

¿Por qué así, señor periodista?