El gran pez

Verla. O no. Sea lo que esto signifique. Somos solo la imaginación que nos habita. Las imágenes que tenemos. Al gran pez no le basta un mundo pequeño de la imaginación. Este es para los charales, los peces pequeños. Sirenas, murciélagos, dragones, hombres lobo, el amor, unicornios, han habitado el mundo de verdad. Los marcianos llegaron ya. Se ha convetido en araña esta mujer por desobedecer a sus padres. Y tienes que escribir versos besando al amor de tu vida. Somos los protagonistas de la película de nuestras vidas. Con los soundtracks mejores. Ícaro va en su ruta al sol. Mas lo intenta. Con alas de cera. En la máquina del tiempo. El cerebro habita el amor por la creación. Y las distintas versiones de ella. Atravesados en las palabras. Discutimos de la mirada y el guiño. Somos el mito que hemos creado.

Comentarios

Entradas populares de este blog

lecturas 20. Poemas de Carlos Pellicer Cámara

De cartas

¿Por qué así, señor periodista?