Mi árbol

Añoso el árbol de mesquite. Al fondo del patio hacia una esquina. Generoso. Sus grandes ramas se extienden por varios metros. Amorosas se abren para abrazarnos. Guardo silencio y nos entendemos. Lo recuerdo cuando niños. Nos subíamos a jugar en él. Colgamos columpio. Y le
comíamos sus vainas dulzonas. Ahora lo veo. Lo abrazo. Y canto la canción de Alberto Cortés. Parecía sonreírme, como queriendo algo decirme.

Comentarios

Entradas populares de este blog

lecturas 20. Poemas de Carlos Pellicer Cámara

De cartas

¿Por qué así, señor periodista?