Suele suceder

Suele suceder que muy seguido abro paréntesis como libros sin cerrarlos. Confundo los azules del mar y el cielo. Y los árboles por las ramas para pájaros. La pimienta la tomo por sorpresa como si fuera comino. Y el aire de la respiración lo tomo para vuelo. Suele suceder que los olvidos los transformo en recuerdos. Y los besos los paso a palabras como versos. Me preocupo sobremanera esta vida de dudas y equívocos. Cómo quisiera navegar con certezas como tantos otros. Seguros de sus pasos van sobre las hojas secas o verdes. O comprenden a cabalidad las fórmula de la sal y el agua. Admiro esa templanza que tienen, seguros de poseer la verdad y que su creencia es la mejor. En cambio yo ando con dudas, con incertidumbres. Suele suceder que sueño. Y en el sueño resplandecen luces de colores y sonrisas al vuelo como mariposas. Y despierto a otro sueño donde la señal de identidad son los guiños. Suele suceder que me escabullo cuando menos lo esperan y aparezco en el abracadabra rito de los magos. Al final se cierra el paréntesis del sueño.

Comentarios

Entradas populares de este blog

lecturas 20. Poemas de Carlos Pellicer Cámara

Rigo Tovar y Chico Ché

Max in memoriam