Sueños y muerte

1

¿Cómo será la muerte? ¿Cómo será ese preciso instante del tránsito de la vida a la muerte? No lo sé ni lo quiero investigar. Mientras tanto a vivir lo mejor que se pueda, si la vida es bella, y más cuando ponemos de nuestra parte con sonrisas y optimismo medido, y haciendo empatía con los demás, sobretodo con los que sufren. He tenido sueños que me perturban. Y despertares raros. Hoy mismo soñé que despertaba en una ciudad distinta, aunque no muy lejana de Villahermosa, quizá Comalcalco o Cárdenas. ¿Cómo fui a llegar hasta allí? Lo tenía borrado. Solo que andaba deambulando sin conocer las calles, las casas, los comercios. Y necesitaba buscar el camino de regreso. Y no es que lo estuviera soñando. Solo que desperté allá, mi alma separada de mi cuerpo, y no hallaba cómo regresar con el cuerpo que estaba en la cama, en mi casa. Finalmente, en segundos o fracciones, se unieron alma y cuerpo y volví en mí, despertando ahora sí en mi cama.

2

Eso debe ser la muerte, creo. Cuando al alma ya no le da tiempode regresar al cuerpo. Y este se queda sin esencia. Ya sin identidad sideral, entonces sucumbe y se detiene todo lo movible, lo que origina el movimiento, pensamiento, ideas. Y es cuanto, donde acaba todo lo conocido para entrar a otra dimensión, donde es el alma quien prevalece, sin forma, sin nombre, sin recuerdos, sin nada lo que indetifica a la persona a como la conocimos. Eso debe ser la muerte. Lo que se llama también la vida eterna de las almas. Por allá andan," ingrávidas, como pompa de jabón. Me gusta verlas..., dice el cantante.

3

Hace días quemaron un mueble de sala viejo a un costado de mi casa. Entró parte de humo con los aires acondicionados. Algo de terror, porque ya era de noche y había que dormir. Sucedió algo que nunca me había sucedido. En efecto me dormí y a la hora desperté. Pero lo curioso es que despertó mi mente, pero no mi cuerpo. Yo repasaba lo que había sucedido del mueble quemándose, la humareda, pero no podía mover nada de mi cuerpo. Claro, no fue por muchos segundos, quizá unos veinte. Y luego ya desperté normal. No lo dije a nadie. pero me pongo a pensar si eso es también la antesala de la muerte: despierta el cerebro, pero el cuero no.

4

"Es que se te subió el muerto", me dicen a quienes se lo he platicado. Y no, porque esa sensación ya me ha pasado otras veces, de que tu cuerpo parece engarrotado, sientes que alguien está sobre de ti, haces un esfuerzo por quitarlo y no puedes, incluso a veces tiene su mano puesta en tu cuello, como si te fuera asfixiar, y no, solo que el "muerto" está allí, conteniendo tu respiración. Hasta que finamente despiertas, recuerdas que te estaba sucediendo en la vida real, pero era parte final del sueño. Hay quienes amanecen con marcas en el cuello, pero eso ya es otra cosa. Y algunos hasta con arañazos en la espalda, pero eso, digo ya es otra cosa.

5

Silvio sueña con serpientes de mar. Y uno cree imaginarse lo que ello significa: el odio, la envidia, el chisme. Pero son de mar, lo que pudiera ser el agua que rodea la isla, las 90 millas que separan a Cuba de Miami, Florida. Puede ser la censura y la autocensura. Pueden ser tantas cosas: "la mato y aparece otra mayor...Me trata de tragar/ Pero se atora con un trébol de mi sien/ Creo que está loca/ Le doy de masticar una paloma/ Y la enveneno de mi bien/ Oh, oh, oh/ La mato y aparece una mayor/ Oh, oh, oh/ Con mucho más infierno en digestión..."

6

Me cuentan que hay quienes no sueñan. No lo sé. Entonces creo en mi humilde opinión que dormir sin soñar es llanamente un despilfarro de tiempo. Si multiplicamos las ocho horas, por 365 días al año, serían algo así como, en mi caso  (63 años de edad) 21 años desperdiciados; claro se descansa, si acaso, claro, se reponen fuerzas para bregar el resto de las horas del día, pero sin soñar es un gran desperdicio de tiempo. Aunque creo que soñar o no, no depende de la persona, sino de la fisiología personal, pero en mucho han de ayudar las lecturas, las charlas con amigos, los amores ganados y perdidos, etc.

7

Una ocasión soñé que me llevaban en camilla por los pasillos del hospital de ISSET (dependencia para los trabajadores del estado de Tabasco). Yo veía todo en sepia, la prisa de los camilleros. Escuchaba que decían algo así como que "se nos va". Y algunas personas curiosas miraban pasar la camilla. Yo miraba a mis padres (ya fallecidos) y a algunos amigos también ya fallecidos. Y en ese momento me desperté. No estaba respirando. Estaba oscuro. Y empecé a saltar, aprovechando los 40 segundos que me quedaban, y poco a poco la respiración vino a mí. Ese día fui al médico sin falta, y me auscultó lo más que pudo. Usted está bien, solo tiene algunas perturbaciones que le inquietan.

8

Unos dicen que dormir es practicar la muerte. Yo no lo creo. Otros dicen que "no duermen, sueñan". Esta expresión me agrada, soy uno de ellos. Y hay quienes le buscan sentido a los sueños, interpretando de una forma a otras a veces contradictoria. Si sueñas excremento dicen que significa dinero, te va caer a manos llenas. Si sueñas víboras es que te están calumniando o te van a involucrar en un chisme. Si sueñas con un amor perdido es porque la extrañas. Si sueñas con perros es que te va ir bien en la vida. Y cosas por el estilo.

9

Yo sueño a diario. a veces quedan grabados muy bien y los recuerdo a detalles. Otras veces solo tengo recuerdos vagos de lo que soñé, y a medida que los evoco, van apareciendo más detalles. A veces los escribo, y las más de veces los olvido. Soñar es una manera de tener otras vidas. Soñar es saber que no solo de cuerpo vive el hombre. Y que lo conocido es muy poco en comparación a lo desconocido. que exactamente no somos más que polvo de estrellas. Y que estamos de paso. Yo digo que soñar es como tener un cine en uno mismo.

10

De la vida es sueño, de calderón De la Barca: "...Sueña el rey que es rey, y vive/ con este engaño mandando,/ disponiendo y gobernando;/ y este aplauso, que recibe/ prestado, en el viento escribe/ y en cenizas le convierte/ la muerte (¡desdicha fuerte!):.. Sueña el rico en su riqueza,/ que más cuidados le ofrece;/ sueña el pobre que padece/ su miseria y su pobreza;/ sueña el que a medrar empieza,/ sueña el que afana y pretende,/ sueña el que agravia y ofende,/ y en el mundo, en conclusión,/ todos sueñan lo que son,/ aunque ninguno lo entiende./ Yo sueño que estoy aquí,/ destas prisiones cargado;/ y soñé que en otro estado/ más lisonjero me vi./ ¿Qué es la vida? Un frenesí./ ¿Qué es la vida? Una ilusión,/ una sombra, una ficción,/ y el mayor bien es pequeño;/ que toda la vida es sueño,/ y los sueños, sueños son."



 


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