Café
Café del sueño y ensueño. De la siempre bienvenida. De la palabra soñada. Del silencio apetecible. De la mirada concreta. Café de la luz y la sombra. De lo que se sueña y asombra. De lo que se sueña, evoca y nombra. Del romancero gitano y todas las posibles obras. Del sabor amargo que endulza la vida. Del sabor que aleja tristezas. Del aroma que se asocia con la palabra luz y dulzor. De lo que es amistad y a la vez amor. Si la vida es fugaz y efímera. El saborear café es eternidad presentida. Escribo que escribo. Y a mi lado esta taza, este café, de ensueño.
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