Hoy domingo

Intuyo en lo bajo el sonido marcial de una banda. Oh, caracol bajo el sol. Y cambia a Moncayo de pronto. Una fuerza audaz. Para este domingo de ensueño. Suben y bajan, entran y salen al escenario que es nuestra vida, sonidos de tantos instrumentos. Para la lucha por la paz y razón. ¿Qué es eso de extrañar? Mueva montañas la fe. Ese ritmo del Huapango. Fiesta del sentir al por mayor. Allí estás, asomándote a la ventana, para saber de la vida exterior. Se apaga y prende la luz. La poderosa luz. Y la armonía de sonidos. Este domingo, es fuerza de vida. Como cada día. Sueña el caimán. Siempre, al despertar. Nuestra raíz. No la olvides nunca.

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