Muro

1

Cierto solo hay pared. O la rompes o te esperas que caiga sola, el tiempo. Si te das la media vuelta, te topas pared. Desde siempre han estado allí. Y has estado allí. Aún fingiendo que no hay. Allí está 7n muro. Rústico o fino. Al principio golpeabas para que alguien te escuchara de aquel lado. Y pudiera ayudarte. Luego con los puños adoloridos declinaste. Ni un solo ruido. Como si fuera celda. Un clima fresco para el bien estar. Confort. Libros. Café. Y el muro parece indestructible. Lo es. Has decidido esperar. No sabes qué. Un estruendo. Una solución mágica. Algo que derribe la pared. Las paredes. A veces las ves frágiles. A veces muy compactas. Y cada vez que las miras vienen a ti recuerdos. De una vitrina. De un desfile. De un paseo en el parque. Por supuesto es un sueño. No hay pared. Nada impide que des un paso o dos. O que des un salto. 

2

El muro es un símbolo. Representa todos los obstáculos que la propia mente crea y recrea. La pared es un límite que imponen las estructuras. Y que vas cediendo por flojera. O porque no hay metas. O conciencia de lo que significa la vida. Un aparato publicitario te cerca para que pienses en comprar y tener otro poco más cada vez. Un terreno y otro. Una casa y otra. Una vaca y otra más. Una más. Una joya. Más joyas. Un auto con cada vez más caballos de fuerza. Y así hasta parecer la única ruta posible. Como un muro de consumo donde no qued más que comprar.

Comentarios

Entradas populares de este blog

lecturas 20. Poemas de Carlos Pellicer Cámara

De cartas

¿Por qué así, señor periodista?