De la memoria al corazón

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He aquí que hice un viaje de ida y vuelta a Coatzacoalcos, ciudad petrolera que está a 2.15 horas de Villahermosa. Y el motivo fue presentar un libro, en el que participo: "Leer y Escribir; de la memoria al corazón". Fui en auto. Llegué dos horas antes de la hora programada; así que aproveché  para comer sopa de mariscos, en "Aguachile", restaurant. Y, mientras comía, vi pasar, como si entrara en una máquina del tiempo, una panga (chalán también les dicen), y un barco griego oxidado, como de hace cien años. El mesero Fernando nos explicó que de aquel lado (mediante agua) estaba el poblado Allende. Y "¿Mira usted aquel grupo de farolas? -preguntó señalando- Es el final de un túnel que va bajo agua. Es de dos carriles. Y es el máximo atractivo de ese lugar", dijo explícito. 

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Presentar un libro no solo es ese hecho. Sino con cada presentación, aparte del tema que sea, se reitera que la escritura y la lectura son actividades exclusiva, única y esencialmente humanas. Y se reitera asimismo que la invención de la escritura es la frontera con la que los científicos sociales dividieron la prehistoria (los homínidos) de la historia (homo sapiens). Y mucho más si el tema es precisamente a como lo dice su título: "Leer y escribir", dos de las actividades capitales para el desarrollo individual y social, cuya práctica constante, junto con escuchar y hablar, define pensamientos más lúcidos, más lógicos.

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Precisamente en Coatzacoalcos, Samuel García, un profesor en Filosofía y Letras, dirige la Unidad 10 de la Universidad Pedagógica Nacional, y desde allí, entusiasta y alegre, promueve las actividades relacionadas con el pensar y reflexionar, tan necesarias para todos, y más para los docentes, y entre ellas, la lectura y la escritura de textos. Precisamente el libro al que aludo y que presentamos, contiene cuatro textos donde los autores recuerdan la manera como se acercaron a la lectura y adquirieron el hábito de leer consuetudinariamente. 

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El evento fue en la sala de cabildo de la presidencia municipal. El policía guardia nos identificó (a mi esposa y a mí) desde lejos. Me hizo señas desde la distancia como de cincuenta metros. Anda uno despistado que eso es notorio. Ya nos acercamos y nos dio muy atento las indicaciones:"Suba las escaleras, primer piso, a la derecha".  Subimos y entramos. Imponente el mural a la derecha, la historia de un pueblo con sus orígenes, su trayecto y presente; la cosmovisión completa de una cultura bien integrada. Símbolos y presencias, en la integración del hombre cn la naturaleza de la que forma parte. 

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Los presentadores fueron dos jóvenes brillantes. Vicente Blanco Martínez, especialista en Letras y Adrián Rodríguez Tonche, de Humanidades. Ambos, de manera sustancial, comentaron sobre cada uno de los textos que integran el libro. Destacan la manera como cada autor se acercó a los libros y cómo estos los entusiasmaron para seguir en la ruta de lectura como hábito. Y lo que dicho hábito representó en su desarrollo interior y profesional. Asimismo de la aridez que representa la promoción a la lectura libre. Dice Vicente: la escuela representa en los niños recreo, deporte, amigos, etc. No conocimiento, libros o estudio. Dice Adrián: Debemos persistir en la lectura y escritura, porque entra en la memoria.

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De la memoria al corazón, es el subtítulo del libro Leer y escribir.  De la memoria de los lectores habituales al corazón de quien empatiza con el tema, sea lector también, o además promotor de lectura. Presentar un libro es resaltar la importancia de la escritura, como distintivo de lo humano. Todo lo contrario es lo inhumano: la crueldad, la guerra, el lucro, la explotación del hombre, lo sucio, el feminicidio, el abandono a ancianos. Y la lista es amplia: el peculado, la trampa, el fraude, la desviación de recursos, el cierre de bibliotecas, el acaparamiento de mercancías, el robar, mentir, traicionar, la deslealtad. Lo humano es leer, escribir, la solidaridad, la misericordia, la bondad, el abandono a escuelas, priorizar la ganancia por sobre la educación. Simular educación, y no poner alto a la publicidad engañosa, al entretenimiento bobo. 

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Se contó con la presencia de un público atento. Y la presencia de la regidora de Educación, Yajaira Tadeo Rodríguez; la maestra Paola Cabrera Antonio, Delegada regional de la SEP; el rector de la Universidad Istmo Americana, Juan Manuel Rodríguez Caamaño; y el distinguido periodista Vicente Martínez Blanco, homónimo de uno de los presentadores. Asimismo maestros y maestras de diversos niveles incluyendo de la Universidad pedagógica Nacional-campus Coatzacoalcos. Qué grato saber y constatar que sigue habiendo público en las actividades culturales. Y qué grato saber que hay cómplices en la promotoría de la lectura libre. Todo acto cultural y educativo, es acto de resistencia contra la barbarie, sin duda alguna. Muchas gracias a todos los asistentes.

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¿Y se puede vivir sin tener el hábito a la lectura? Sí, claro. Una vida con menos comprensión de lo que sucede a nuestro alrededor. Proclives a creer mentiras y morir por ideologías políticas o religiosas. ¿Y se puede ser buena persona sin ser lector? Sí, por supuesto. Conozco muchas personas y conocí muchas personas analfabetas de gran corazón y solidarias. Entre ellos mi padre y madre. Y Don Chilo Osorio, en Nacajuca, Tabasco. Y muchos más. ¿Y se puede ser lector habitual y ser persona mala socialmente? Sí, sin duda alguna. Y muchos de ellos han llegado a puestos pequeños, medianos y altos a los gobiernos de los tres niveles. Y puede uno seguir así con dichas preguntas no planteadas, pero que vale la pena plantearlas, como si las hubieran hecho en el público.

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En mi turno leí un texto sobre cómo se forman los no lectores, y que están en todas partes. Y aseguro que no tienen la culpa de esa condición, por las circunstancias que les ha tocado vivir, afirmación con base al aforismo de Ortega y Gasset: "el hombre es él y sus circunstancias". Y de manera sarcástica hice alusión de la manera como llegan los oficios de la instancia educativa de la importancia de promover las lecturas a las escuelas, y directivos no lectores hacen llegar el mensaje a las escuelas, y lo leen en Consejos técnicos y reuniones de maestros y padres de familia, en la que se firma de enterado, para regresarlo como evidencia de que se está cumpliendo con la indicación educativa.

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Samuel Pérez García, coautor y editor del libro, contó la manera como se acercó a la poesía y a la filosofía, iniciando con la preciosa Iliada y Odisea, del vate ciego Homero. Y sus lecturas sobre Marx. Engels, Gramsci y otros, que le hicieron entender de las razones por las que hay ricos y pobres en la sociedad, y que no es precisamente por casualidades o destinos manifiestos. Y al final dio a conocer diez dedicatorias que escribiría, una de ellas, a escoger, en el libro comprado por el público, en la módica cantidad de cien pesitos. Dos autores más integran el libro con sus textos: Miguel Ángel Pérez Reynoso y Juan Antonio Castañeda Arellano.

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Ida y vuelta en el mismo día Villahermosa-Coatzacoalcos, Villahermosa. La distancia de 180 kilómetros lo permite. Ensimismado en los pensamientos y la escucha de música, como autómata manejé dicha distancia. Y solo me dí cuenta que estaba llegando al municipio de Cárdenas, (48 kilómetros para llegar a casa) cuando ví a mi costado izquierdo una alta humareda negrísima que destacaba en la densa noche; esto debido al resplandor generado con la quema de gas de la batería de Pemex.