Cuaderno de Leonor Arrona

Es una rendija por donde me asomo y miro. Camellos y gacelas hormigas pequeñitas con su propio cielo Adornos con celofán y libros en bolsas de regalo Y un gran teatro donde miro atento la obra de saltimbanquis y asnos. Un ruiseñor disecado. En ella aparece alguien como yo alguien más como tú y como todos.   

  Salgo a caminar, por la cintura cósmica del sur 1. Hace quince días volví a caminar como ejercicio, esto a punto de llegar a mis 61 años. Meses antes había reparado mi bicicleta, y anduve como por veinte días rodando en mi colonia, respirando el aire matinal y sudando la gota fría. Ni recuerdo por qué la dejé. Y me enrolé de nuevo en el sedentarismo que enferma al cuerpo y por extensión a la mente. L apalabra sedentario la escuché por primera vez en secundaria. Cuando el hombre primitivo pasa de nómada a sedentario. La volví a escuchar cuando fui con el médico hace unos veinte años por problemas de estrés. “Debe usted de dejar el sedentarismo”. Yo me dije a mí mismo con toda la carga de orgullo: “y eso que tiene que ver”. Me explicó que usamos carro hasta para ir a la tienda que está a dos cuadras de la casa. Y que caminamos diez pasos para subirnos al carro rumbo al trabajo. Y lo dejamos en el estacionamiento lo más cerca posible a nuestro escritorio. Y fue cuando me cayó el veinte,

  1 Como si todo se detuviera cuando llueve. Menos el movimiento incesante del agua. Y el nivel en las partes bajas, que va subiendo de poco en poco. Más allá del pesar de quienes viven en esos lugares. Más allá de la indiferencia de quienes viven en partes altas. Y más allá también de las culpas que siempre se tiran de un bando a otro:  al gobierno estatal, al municipal, al ciudadano que tira basura de manera inmisericorde. Bandos hacia un lado, hacia otro. Mientras tanto todo está detenido. Y muchas colonias inundadas con encharcamientos superados por la magnitud en profundidad y en extensión.   2 Los lugares bajos se inundarán hoy y siempre. Porque el agua tiene memoria y se ubica por gravedad precisamente en esos lugares. No hay vuelta de hoja. Precisamente en la parte legal de uso de suelo, se especifican las áreas que son propicias para desarrollar programas de vivienda y donde no. Y por razones que no es este espacio para discutir, se extendieron muchas autorizaciones para lugar

  1 Ayer Cuba le rindió homenaje a la cantante internacional Omara Portuondo en sus 90 años de nacimiento. Lo hizo de manera cálida y en las condiciones de pandemia. El Sauto, teatro principal de Santiago de Cuba, se vistió de gala, sin público presente, y vimos a la verdadera diva plena y feliz en su cumpleaños recibiendo el cariño de tanta gente, la orquesta XXXX, con su bella cantante, sus maravillosos músicos, autoridades culturales que le hicieron llegar presentes, y acompañada de nosotros, su público que desde varias partes del mundo gozamos el bello y muy humano espectáculo musical.       2 Omara Portuondo es la voz femenina del Buena Vista Social Club, proyecto musical impulsado por el guitarrista estadounidense Ry Cooder, quien se ha dedicado por años a grabar a cantantes, y grupos que, siendo importantes en determinadas áreas geográficas, el olfato de Wenders los descubre y os impulsa. Es el caso de un puñado de músicos y cantantes cubanos, ya jubilados en Cuba, que tomaron s

Toqué una puerta donde no había. Solo una pared con dibujo de puerta. Allí estuve esperando un "pase usted". "Bienvenido". Y leí el letrero que a la mirada decía: puerta de salida.   

Solo que el tiempo pasa lento. Como para tomar café y se enfríe. Y jugar damas chinas. Hay tiempo para la vida y la muerte. En tanto sonría la suerte, deshojar la flor. En el sí o no. Y en balance armas el rompecabezas con piezas forzadas. 

Hay muchas maneras de ver la carretera. Hay quienes se sientan a su orilla y miran pasar los autos. Otros van en ellos. Y miran a través de la ventana. En velocidad tal donde todo pasa. Hay otros que van caminando. Les da tiempo de saludar. Y de vez en cuando se sientan a descansar a la sombra de un árbol. Y continúan luego en sus pasos. Donde estés ubicado busca la felicidad. Que por cierto son solo instantes. 

Somos memoria.  Donde caben todos los recuerdos Sabiéndolos acomodar.  En la pena En la risa Los de aliento.  Salta corazón.  Apenas esto inicia

1 Antes era el teléfono de casa (para los que tenían). Luego vinieron los teléfonos celulares, siendo los primeros una especie de ladrillos negros. Y poco a poco fuimos testigos cómo les fueron poniendo nuevos aditamentos y aplicaciones, hasta llegar al concepto de teléfono “inteligente”. Si bobos los empresarios no son. A través de la publicidad logran hacer sentir la necesidad de tener no solo un teléfono y en lo posible dos, sino el tener el más nuevo.   2 Trato de imaginarme cómo hacían nuestras madres para saber dónde andábamos, si salíamos en la mañana, y regresábamos ya de tarde, y a veces a media noche. Seguro que se guardaban sus preocupaciones. Ahora con el celular es muy fácil. Basta una llamada o un mensaje. Y si queremos que pasen por nosotros, hasta mandamos la “ubicación”, que a través de una app (aplicación) nos va diciendo santo y seña del lugar donde nos encontramos.   3 Pero lo mismo es el desarrollo de la telefonía, que el uso delictivo de los datos nuestros que por

  Las cosas sencillas (Parte 2)   1 Las cosas sencillas son tantas. Están en todas partes. Nos rodean. Las miramos de soslayo. Pasamos de largo. Porque siempre consideramos que hay cosas más importantes. Y esperamos que sucedan. Y así va nuestra vida. Un abrazo de mamá o papá es algo muy sencillo. Pero tiene una gran trascendencia en el crecimiento de uno, en la sensación de sentirnos acompañados.    2 Me llama una hermana: “te hablé para que me mandes fotos de mamá y papá, porque estoy poniendo un altar en la casa”. “Te las mando en la tarde”, le dije. Platicamos de otras cosas. Me pone al día de mi barrio y pueblo. Yo la pongo al día sobre mí. En la noche me puse a buscar fotos digitalizados, de las que tengo en el teléfono. Otras las tengo en viejos discos duros que años hace que no reviso, y es donde tengo fotos de cuando nevó en Matamoros hace como quince años.   3 Las fotografías son testimonios de un instante. Quedan plasmada a través de la química unas imágnes del pasado. (Difí

Necio el hombre que mira el reloj como si viera el tiempo. Y no se detiene a observar la natural belleza de las cosas. Aumenta la velocidad en su auto. Y todo lo pide para el momento. Ninguna espera le justifica. El tiempo es oro, dice.  Necio el hombre que no canta. Algo falta en su garganta. Y es el motivo por el que tiene pájaros en jaula. Los oye. Trata de escribir en pautado. Por la noche sueña en alas.  Necio el hombre que finca su presente en la palabra. Si todo es búsqueda sin aliento. Y al final nos lleva el tiempo. Descarnados. Y nos vuelve polvo a la tierra.  Necio el hombre que haces planes para el futuro, y no para el pasado, que es el único tiempo que realmente existió.

  Las cosas sencillas   A veces  -o es muy común- no valoramos las cosas sencillas. De acuerdo a nuestro origen nos acostumbramos a muchas cosas en lo cotidiando. Lo que nos es común en el día a día. Y damos por sentado que todo es así. Y que nos merecemos más de lo que tenemos. Una casa (recuerde la que tuvo en la indancia), una escuela, padres, amigos, vecinos. Y en cada una de esas circunstancias hay una cantidad de pequeños detalles que van conformando nuestro conjunto de recuerdos. Puede sonar cursi (lo es), es como si fuera un cofre de recuerdos, el cual abrimos de vez en vez.   Y un recuerdo se encadena a otro. Y este a otro más, Hasta que volvemos el pensamiento al presente, al momento, que a veces es de prisa para atender lo cotidiano, lo urgente. Pero todos pensamos distinto. Y cada quien tiene sus propios afanes y anhelos. Y cada quien va en su ritmo. Yo inmediatamente al salir de casa, vi el rocío en el pasto y hierba del frente de mi casa. Es un campo grande donde se juega

Juego la nada. Apuesto todo Si sucede algo extraordinario Si escribes o no. Si sigues soñando De todas maneras espera en la estación Jugar la nada es saber del destino del hombre. De todo lo que vive para  morir. Cruzan sus brazos Qué bien el llanto. Luego el silencio. El amor o el odio son también la nada Lo mismo el tren que pasa La golondrina, la canción de moda El cigarro que se acaba La nada es esa ausencia que oprime Es el libro bajo la lluvia El plan sin ruta ni estrategia Es el barco sin timón La nada es también la espera La dulce y paciente espera  No sé. Unas cuantas palabras dulces Aún no es tarde. Vamos con calma

  Compositores   1 Ayer vi un video. En él miro a un hombre ya grande edad a quien entrevistan dos hombres también de edad. El entrevistado es el portorriqueño Pedro Flores. A la mayoría de personas ese nombre no les dice nada. Pero si les digo que es el compositor de Amor Perdido, Obsesión, Perdón y Despedida, entre muchas otras, entonces les han de dar las gracias, porque sus versos en canciones nos han acompañado de diversas maneras en nuestras vidas. No escapan que alguna o algunas sean parte de nuestra soundtrack de la película de nuestra vida, en la que somos el personaje principal. Si somos el del error en una pérdida de la relación, entonces cantamos “Perdón, vida de mi vida, perdón, si es que te he faltado, perdón, cariñito amado…”. En cambio si hemos terminado una relación y eso ya no tiene remedio, nos ubicamos en un lugar bohemio, echamos quinto a la rockola y buscamos la de Amor perdido, si como dicen que vives dichosa sin mi, vive dichosa, quizá otros labios te den la for

  De cínicos y otras cosas   1 Si a usted, cuando pase frente a un grupo de personas, o en una discusión de esas interminables, le dicen o gritan cínico, de entrada no se enoje y menos espante. Puede ser que sus interlocutores sepan algo de la historia de la filosofía y reconocen en usted algunas características que lo identifican con ese grupo de filósofos a quienes denominaban precisamente Cínicos. Y que su origen se remonta a los años 400 y 300 antes de Cristo. Y entre sus prácticas que les caracterizaban era el de la sencillez, la habilidad para burlarse con base en sarcasmos e ironía, y sobretodo consideraban que todo lo superfluo no es importante para el individuo, y que somos parte de la naturaleza.   2. En su uso actual la palabra cínico es una ofensa. Es decir si la pronuncia alguien que no sabe de la historia de la filosofía, efectivamente, está tratando más que de ofender, de definir a una persona como mentiroso, de los que prometen y no cumplen, de los que se burlan de todo

 Quieren pescado, no el pez.  Quieren que despierte cuando sueño Aunque pongo todo el empeño de pasarla bien. Quieren que use y me anude bien la corbata Quieren que corra veloz  que baje o eleve la voz,  a conveniencia Quieren que me cruce de brazos Ante la estupidez y el odio feroz. Yo me largo a un buen bar Y pido limón, sal y botana Yo decido mi vida Yo perdí la partida. Ante el lucro rapaz Quieren que alabe a la guerra  O ponga candado a mi voz Que deje de cantar a la rosa fragante Que me olvide de mi Si la vida es sueño e instante Yo apuesto a la luz y a la harina Que haya libros e impere la paz Y a todo corazón de roca lo rompa la miel  Yo me largo a un buen bar Y pido limón, sal y botana  Yo decido mi vida Yo perdí la partida. Ante el lucro rapaz Ñ

Delirio, inducción a torpeza Navegar sin brújula.  Querer tocar una estrella Con causa y mil motivos. Volar a donde nadie espera Con ilusión, sin esperanza Hacer castillos en el aire Creer en la magia del ensueño. Todo se conjuga en los sueños En la realidad son otra cosa La veleidad, indiferencia,prisas Y a otra cosa mariposa. Y el pirata se fue a otros mares A llorar en otros lares, dijo Donde los pesares sean curados Y sea el amor la fortuna Iba triste, desolado, cabizbajo Iba con el corazón herido Iba ciertamente esperanzado Iba con su loro de bolsillo.

  Caminar como los peripatéticos (En memoria de Ricardo Chablé Notario) 1 Hoy fueron 6. 5 kilómetros de caminata. Se motiva uno en el movimiento. Y la alegría de saber que moverse y sudar significan salud. Y que algún amigo o amiga se anime en empezar a realizar algún tipo de ejercicio que se acomode a sus espacios y preferencias. Yo me veo en unos meses más, quizá para abril o mayo, en alguna carrera (de trotar) que se efectúe en Villahermosa, categoría master. No importa en el lugar que llegue. Hay la anécdota de cuento en la que la protagonista dice que una amiga, al ver que portaba una camiseta playera de runners (corredores), le dijo como con sarcasmo ¿a poco tú corres? ¿Y eres de los buenos o los malos? A la respuestas de sí, y que es de los buenos, la otra la contra preguntó ¿A sí?, ¿y en qué lugar quedas? La respuesta fue: “depende de cuántos corran. A veces quedó en quinto lugar. Y a veces en veinte o cincuenta. Soy de los buenos, porque los malos son los que no corren.”    2