Otra de películas por la nostalgia

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En mi niñez mi padre me llevaba al cine popular, que era sin techo y bancas largas como de iglesia, pero rústicas. Y las películas eran de vaqueros principalmente. Del oeste. Eran churros donde el personaje estrella era buen tirador, y en extremo iba mtanado gente a diestra y siniestra, aunque por un fin legítimo: venganza, defensa de mujeres y niños, honor personal, por la verdad, etc. No eran matones sin causa.

2

De las películas que hablé antier, refieren al amor, a las relaciones, a ese deseo ferviente por convivir con alguien que tenga la misma atracción, aunque me permito anotar: unión de almas, aunque no siempre tengan un final feliz. Amor muchas veces es sacrificio, y cada uno hemos pasado por situaciones semejantes, parecidas o exactamente iguales, aunque con otros nombres a los de la película.

3

El tigre y la nieve (2005), es una de esas películas que mueven todo el interior en los recuerdos. El delgado y de lentes profesor de literatura Atilio (Roberto Benigni) está perdidamente enamorado de Vittoria (Nicoletta Braschi) su ex esposa, también maestra de literatura. El profesor ha publicado precisamente un libro que lleva el nombre de la película "El tigre y la nieve". Por más que la pretende, siguiéndola por todos lados, ella se rehusa a volver con él. Luego ella se va a Irak para terminar una entrevista con un poeta de ese lugar, y queda gravemente herida en una explosión de bomba. Le avisan a él, y inicia una aventura por salvarle la vida, desde trasladarse a Irak a donde están prohibidos los vuelos, hasta convencer a un viejo alquimista para que haga la medicina que ella requiere para salvarse. Al fin logra salvarla, pero ella no sabe que full él, aunque al final ella se da cuenta, y suspira. Esta película tiene un inicio de sueño y ensueño. En el sueño él, en bóxer, se encuentra en un lugar donde se va a llevar el matrimonio religioso con ella. los invitados a la ceremonia son escritores famosos de todos los tiempos. Cuando Vitoria entra , dirigiéndose al altar, se escucha la canción emblemática de la película, cantada por  Tom Waits, (You cant never hold back spring (nunca podrás hacer que vuelva la primavera) y entra un agente de tránsito para avisar que un carro está mal estacionado. Y el discurso de ella para aceptar a Atilio, es una belleza de texto. Así también cuando él les explica a sus hijas sobre lo poético. Y cuando a sus alumnos les explica sobre la poesía. Además la melodía es maravillosa: You cant never hold back spring (nunca podrás hacer que vuelva la primavera). ¿Y el tigre y la nieve? Ella le había dicho, como un imposible regreso a ser pareja, que solamente volverían cuando caldera nieve sobre un tigre en Roma, haciendo alusión sarcástica al título del libro. Y al final, a causa de un incendio en un circo, un tigre se escapa, y sobre él caen grupitos blancos que parecen como si fuera nieve que cae, y ella lo mira y sonríe.

 

4

El Diario de una pasión 2004 y Puentes de Madison (1995) tienen el común que son, aparte de buenas películas, todo gira con base en un libro escrito. Alguien lee, y mientras lee, la película va reflejando lo que está escrito. Preparemos las palomitas, que hay función doble, como en los viejos tiempos y además, permanencia voluntaria.

5

En Madison, un fotógrafo de la National Geographic llega a una granja de polvo buscando información para localizar los puentes viejos, de ese lugar reliquia de los tiempos. La mujer le explica dónde está, le da las señas para llegar, pero finalmente decide ir con él para mostrárselos. Ese hecho hace que la cercanía de ambos, la charla, la gracia de ambos, sea el combustible de la atracción. Ella es casada. En ese día y unos dos más, su esposo e hijos fueron a una exposición de ganado en las fiestas de un pueblo cercano. Así que el forastero fotógrafo se queda en la casa acogible y placentera, y el flechazo produce los efectos que son propios de ese caso, incluyendo una botella de vino tinto. Él se regresa a la metrópoli para entregar las fotos, cuando estas son publicadas en la revista le manda un ejemplar. Y ambos tienen el sueño de regresar a la relación. Todos los detalles quedan registrados en un libro que ella escribe, y que a su muerte lo descubren y lo están leyendo su hija e hijo, ya grandes. Al principio se enojan por la infidelidad. Luego poco a poco, a medida que se van adentrando en los detalles de las acciones, se enamoran de esa relación, y admiran a su madre. Ni más ni menos que el galán es Clint Eastwood, y la bella es Doña Meryl Streep.

6

En Diario de una pasión, el libro se lo está leyendo un hombre viejo a una señora con Alzheimer en una casa de retiro. Él acude puntualmente a la visita en dicho lugar. Y cada vez le lee un capítulo. La película, al igual que la de Puentes de Madison, se desarrolla con lo que van leyendo y se muestra en la pantalla. Una historia de amor de Noah y Allie. Ambos de distintas clases sociales, aunado a la circunstancia de guerra, que los separa. Ambos idilios, de película.

7 

Y ya encarrerado me voy a leer el poema Los amorosos, de Jaime Sabines. Y no estaría mal escribir la propia historia. Aunque nadie la lea, aunque nadie l vea.