Carta a cara Caro

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Hola. Esta carta te ha llegado por correo tradicional. Quizá te sorprenda, pero como sabes, escribo, y desde hace algunos meses, a diario. Así que ando buscando la manera de hacer mi comunicación con algunas personas, de esta manera, por carta, género epistolar, y eres la primera destinataria. Es muy distinto a la manera actual de mails y mensajes instantáneos, que son muy útiles, por supuesto, no los demerito, y aunque lo intentara no lo lograría, pero quise volver el rostro atrás, a esta práctica que se me hace muy humana, y que lleva a recordar parte de lo que ha cambiado en las relaciones de las personas.

Ya ves, yo me vine a Tabasco y me fui quedando poco a poco. Le fui encontrando cierto sabor a la vida diaria, escolar universitaria, ambiente de trabajo y finalmente, importante, por supuesto, mi familia.

Yo en todos estos años desde que salí he sabido poco de ti. Tu trabajo escolar por el rumbo donde yo crecí. Y sobre tu trabajo en el teatro, que por cierto una sola vez te vi, en la obra Yocasta. Esa vez hablé a tu casa, y tu madre me dijo que andabas en una obra de teatro y que precisamente la ibas a presentar en un amplio espacio de una plaza comercial. Qué alegría verte. Qué orgulloso de verte, cara Caro.