Miro una fotografía

Miro una fotografía

1

De pronto la fotografía está allí, frente a ti. La tomas y miras detenidamente. Es el registro de un instante. No necesitas ni buscas explicación de por qué el destino la puso allí, para que volvieras al pasado, asomándote a cada rostro que se asoma al presente, mirando al futuro qué ha llegado esta tarde gris, monótona. Dos tiempos se confabulan, entre lo que fue y lo que es.

2

Nada importa si es sepia, blanco y negro o a colores. Importan esas miradas fijas, la sonrisa o seriedad, el brillo de los ojos, lo que ha quedado como un registro de las personas que fueron y no son más, apenas recuerdos de una época que ya pasó. Y si la miras junto con alguien, ¿te preguntarán y este quién es? ¿Y esta? Y contarás algunos detalles poco conocidos de quien preguntan.

3

Fotografía es todo un discurso de microhistoria, es un ensayo sobre el pasado y sobre determinadas personas de una época y momentos correspondientes, la razón de la toma de dicha fotografía. Ese documento jala a la nostalgia, a los recuerdos,  trae lágrimas o risas. Repasa uno los caminos que cada quien siguió en la buena o mala suerte, en el destino para cada uno.

4

Fotos de bodas, bautizos, confirmaciones, cumpleaños, misas especiales; fotos oficiales para documentos donde traemos el pelo corto o bien peinado, seriedad ante la cámara, como que somos otros, o los mismos en pose exigida como obligatoria por el reglamento que especifica los requisitos: fondo blanco, sin retoque, ni aretes, percings, maquillaje, ni cualquier cosa o aditamento que altere, modifique o cambie las facciones propias de la persona.

5

En ocasiones los de la foto de boda se divorciaron, pero no hay foto de ese hecho. Solo se comenta por la estima a uno o a otro, y se le agrega como respuesta, si las conocemos, las causas de dicha separación. En la foto del bautizo el padrino ya murió, o vive con otra mujer que no es la madrina, o nunca supo de ellos, solo que se fueron a los Estados Unidos y nunca más hubo noticia. En las de navidad o año nuevo, o cumpleaños de la abuela o abuelo, se tomó una de grupo, y se procuró que fuera tomada por un vecino que asiste, pero no forma parte de la familia. Y varios de ellos vuelan entre las nubes, 

6

Hay un recorte en la orilla de la fotografía, para quitar a alguien que fue novio o novia pero no lo era más a pocos meses de la toma. ¿Y este quién es?, sale la pregunta y las historias con nostalgia brotan. Otros cielos cobijan a los ausentes. 

7

A mi madre no le gustaba le tomáramos fotografías. Por eso hay muy pocas de ella. Hay oficiales de cuando sacó su tarjeta local para cruce de la frontera. Y alguna otra, muy rara. En alguna traté de sorprenderla sin que se diera cuenta, por tanto se alcanza a ver en su reflejo el movimiento de la mano para cubrirse el rostro. Solo  un año antes de su muerte fue que se dejó de manera natural tomar algunas. Así que de esa vez está una sola, otra con mi papá, y otra más con mis hijas.

8

Te miro desde este tiempo que no es el mismo de la foto. No estás más. Y qué importa. Nadie se llame a engaño. Siempre supimos de la vida fugaz y sin embargo. ¿Queda algo de quien no hay fotografías? Te miro y sin embargo nada miro. Algunos datos se continúan borrando. 

9

Miro una fotografía del niño que fui. Miro una de un viejo que fui. Miro una del padre que fui. Vanas esperanzas por detener el tiempo y mitigar el dolor por la muerte de los otros. Donde dice Antonio ha quedado solo una fotografía en la bodega polvosa. Un niño pregunta a otro "¿ Y este viejo , quién es?" El otro le responde "creo que es un bisabuelo".