Hasta este momento 20:50 de la noche del jueves 12 de marzo, no se han suspendido los juegos de beisbol programados para este fin de semana entre Olmecas, nuestro equipo local y la poderosa selección de Cuba. Aquí en Villahermosa, Campeche y Mérida, programaron gira de preparación rumbo al selectivo a efectuarse en Arizona, Estados Unidos, para buscar el pase al mundial. Pero este selectivo en tierra desértica estadounidense ya fue cancelado por la proliferación del coronavirus.
Yo no soy aficionado más que al basquetbol y al atletismo. Tabasco ha tenido equipo profesional de basquetbol allá por los años ochenta, las Abejas verdes. Y era una maravilla verlos jugar con equipos del circuito nacional. Pero me gusta ver algunos partidos de futbol, precisamente cuando juega la seleccionar nacional, de tal manera que tengo mi playera verde.
En 2003 tuve la oportunidad de ir a La Habana, y coincidió que por esos días se enfrentaran dos de los equipos emblemáticos de Cuba: Industriales y Barrio Habana. Nos invitó Miguel, un cubano vecino de donde llegamos a alquilar. Tenía un viejo Chevrolet 58 como auto de alquiler. Y se ofreció a pagar la entrada, porque iba a pagar en pesos cubanos. Como 5 pesos mexicanos de ahorita. "Nomás no hablen para que no los descubran que son mexicanos,", nos sugirió. Nos vio fijamente al rostro, éramos un grupo de cinco, y a todos les dio el visto bueno como de rasgos cubanos, "menos tú", dijo señalándome a mi.
Entramos al imponente estadio. Previo al inicio del juego, cantaron el himno nacional. La afición, casi todos cubanos, con un respeto absoluto por su himno. Cantaron a todo pulmón. Fue un verdadero espectáculo deportivo. El pitcher de Industriales, que por supuesto, no recuerdo el nombre, (probable sea Gerardo Regalado Hernández, que luego mató a cuatro mujeres en EEUU y se suicidó) estaba muy vigilado, porque se sabía que lo querían "comprar" los Yankees de Nueva York. Ya dos medios hermanos de él, Orlando y Liván Hernández, estaban jugando en grandes ligas, uno con Yankees y el otro con Marlins. La regla de la liga a la que llaman mundial, en ese tiempo, era que los jugadores cubanos no pueden huir de Cuba y ser contratados directamente. Sino que deben de ir antes a jugar profesionalmente a otro país.
Una pelota de foul a las gradas hizo que Miguel, nuestro amigo cubano, corriera a pedirla o comprarla a quien la había atrapado, para regalarla a la amiga Nury que iba con nosotros.
Hace unos 15 años jugaron las selecciones juveniles de beisbol de Cuba y Estados Unidos aquí en Villahermosa, y tuve la oportunidad de ir. Ganó Cuba.
El caso es que hace días anunciaron que viene este fin de semana la selección cubana a jugar contra Olmecas. precios de entrada económicos. 120 pesos el más caro. 60 el más barato. Pero hace dos horas la noticia de una probable suspensión encadenada a la suspensión del selectivo en Arizona, a causa del coronavirus, tiene pendiente en las próximas horas confirmar si siempre vienen los cubanos o no. Estaremos al pendiente.
Yo no soy aficionado más que al basquetbol y al atletismo. Tabasco ha tenido equipo profesional de basquetbol allá por los años ochenta, las Abejas verdes. Y era una maravilla verlos jugar con equipos del circuito nacional. Pero me gusta ver algunos partidos de futbol, precisamente cuando juega la seleccionar nacional, de tal manera que tengo mi playera verde.
En 2003 tuve la oportunidad de ir a La Habana, y coincidió que por esos días se enfrentaran dos de los equipos emblemáticos de Cuba: Industriales y Barrio Habana. Nos invitó Miguel, un cubano vecino de donde llegamos a alquilar. Tenía un viejo Chevrolet 58 como auto de alquiler. Y se ofreció a pagar la entrada, porque iba a pagar en pesos cubanos. Como 5 pesos mexicanos de ahorita. "Nomás no hablen para que no los descubran que son mexicanos,", nos sugirió. Nos vio fijamente al rostro, éramos un grupo de cinco, y a todos les dio el visto bueno como de rasgos cubanos, "menos tú", dijo señalándome a mi.
Entramos al imponente estadio. Previo al inicio del juego, cantaron el himno nacional. La afición, casi todos cubanos, con un respeto absoluto por su himno. Cantaron a todo pulmón. Fue un verdadero espectáculo deportivo. El pitcher de Industriales, que por supuesto, no recuerdo el nombre, (probable sea Gerardo Regalado Hernández, que luego mató a cuatro mujeres en EEUU y se suicidó) estaba muy vigilado, porque se sabía que lo querían "comprar" los Yankees de Nueva York. Ya dos medios hermanos de él, Orlando y Liván Hernández, estaban jugando en grandes ligas, uno con Yankees y el otro con Marlins. La regla de la liga a la que llaman mundial, en ese tiempo, era que los jugadores cubanos no pueden huir de Cuba y ser contratados directamente. Sino que deben de ir antes a jugar profesionalmente a otro país.
Una pelota de foul a las gradas hizo que Miguel, nuestro amigo cubano, corriera a pedirla o comprarla a quien la había atrapado, para regalarla a la amiga Nury que iba con nosotros.
Hace unos 15 años jugaron las selecciones juveniles de beisbol de Cuba y Estados Unidos aquí en Villahermosa, y tuve la oportunidad de ir. Ganó Cuba.
El caso es que hace días anunciaron que viene este fin de semana la selección cubana a jugar contra Olmecas. precios de entrada económicos. 120 pesos el más caro. 60 el más barato. Pero hace dos horas la noticia de una probable suspensión encadenada a la suspensión del selectivo en Arizona, a causa del coronavirus, tiene pendiente en las próximas horas confirmar si siempre vienen los cubanos o no. Estaremos al pendiente.
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