Feliz Día de la educadora

 Alas, a las Educadoras. ¡Felicidades en su Día!

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Hoy es el día de quien escogió al salir de la preparatoria que su destino laboral seria con los niños entre 3 y 6 años: la Educadora. Para lo cual se requiere mucha paciencia y un corazón bien puesto para crear visión de futuro en los niños, en una definición clara de lo que debe ser la educación en su conjunto: solo aprendiendo como un juego, se logran verdaderos aprendizajes. Y esto vale para los siguientes niveles de educación básica.

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Por eso las felicito, porque su trabajo con los niños es la primera relación que ellos tienen fuera de su casa, lo que podríamos llamar confort de casa, y en correspondencia deben sentir un confort en la escuela que les haga sentirse bien desde los primeros días. Y quién más que una alegre, entusiasta, paciente y amorosa educadora, para recibirlos y conducirlos en ese camino de la enseñanza temprana desde un centro escolar. 

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Yo no tuve la fortuna de estudiar en preescolar, y no porque no hubiera escuela. Cerca de mi casa, ya estaba y está el Preescolar 20-30, en mi colonia Treviño Zapata, barrio donde nací y crecí. Sino porque mis padres no contemplaban que fuera un lugar serio, pero ellos no lo sabían, no estudiaron grado alguno. Pero aún ahora, en pleno 2021 muchos padres no mandan a sus hijos a los 3 o 4 años, sino ya a los 5, solo para acreditar que pasaron sus hijos por el kinder.

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Tan importante es el preescolar en el desarrollo del niño que afortunadamente ya casi hay un consenso social al respecto. Pero aún quedan algunos rezagos. Y sobre eso se tiene que trabajar. Lo bueno que ya constitucionalmente está considerada la educación preescolar como obligatoria, y se ha avanzado al respecto.  Falta, eso sí, mucha infraestructura, sobretodo en el medio rural. Pero eso es ya otro asunto. Por lo pronto muchas felicidades a todas las educadoras del mundo, principalmente a las de Tabasco.

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Hasta el 2014, en mi transitar en la educación, conocí de lejos a las admitadas educadoras. Siempre se ha dicho que en el nivel de preescolar todas las maestras son muy guapas. Mucho de cierto tiene esa afirmación. Pero ya en 2015 me tocó por función atender parte de la problemática de ese sector, que corresponde a educación básica. Recuerdo bien que el primer caso era de una zona escolar que no querían recibir a una nueva supervisora, no recuerdo las razones. En grupo presentaron un oficio donde argumentaban sus objeciones. Y afortunadamente se pudo mediar para resolver el asunto en acuerdo con el nivel administrativo. 

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Y coincidió que el día que se les dio la respuesta era un día como hoy 21 de abril, y armamos para su sorpresa, un pequeño convivio ofrecido de corazón, con pastel, refresco y palabras. Eran como 60. ¿Y por qué atiende así? dijeron, ya habían dicho que percibieron que yo atendía con sencillez y humildad. Mi respuesta fue que así me hubiera gustado que atendieran a mis padres en las oficinas públicas en sus trámites.  

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Ah, pero fui de visita a muchas escuelas de preescolar, por invitaciones. (Lo mismo, aclaro, que a primarias y secundarias). Y vi en esos centros escolares, -donde los tesoros pequeñines de las familias son lo más importante- una gran organización, alegría, entusiasmo, y profesionalidad de educadoras y educadores. Y en los niños y niñas ni se diga, la gallardía en las escoltas y bandas de guerra, la entrega y entusiasmo en los diversos números. Visité tanto jardines del medio rural como de la ciudad. Y recuerdo que era Día de las Naciones Unidas, Día del ejército, Día de las madres, Festival de cuenta cuentos, y de declamación.  Y constaté que el sueño educativo de una mejor sociedad se forja en el preescolar. Así es y así sea.

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Pasando a otra cosa. Es sano y saludable, cuando menos para mí, no dedicar este espacio a las campañas. Suficiente tengo con tanta propaganda en mi muro al igual que, como el de muchos de ustedes, se ha llenado de anuncios de campañas de todos los colores y sabores (y sin sabor también), y eso seguro que es ganancia de la empresa multinacional Facebook, Instagram y las demás plataformas de este tipo. Y el hecho de ser candidatos es ganancia de algunos. Cuando menos en el curriculum. "Fue candidato a la presidencia de Turinguato", etc.

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Por eso mejor escribo de cotidianidades en referencia a otras cosas. Importantes, por supuesto. Que si es seguro o no volver en estas semanas a clases presenciales. Sobretodo que en otros países ya está la tercera ola de contagios. Y ni se diga en la India cuya efervescencia en contagios está a la orden del día, rebasando completamente los servicios de salud.

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Es esencial la educación, sea presencial o a distancia. Esta última no es lo ideal, pero se comprende que fue la solución extraordinaria a la circunstancia extraordinaria de la pandemia. Pero ojo con lo que digo: lo importante es que el alumno aprenda a aprender, y contempla en ello el despertar la curiosidad por conocer el mundo en que vive y vivirá. Y un gran avance sobre esta ruta es inculcar el hábito de la lectura (lo cual tampoco es fácil y más, mucho más difícil, si el docente no es lector). Solamente si se logra esto, las cosas mejorarán en el sistema educativo. Sí, ya sé que no es fácil, y que es muy fácil decirlo desde la comodidad de escribir desde una computadora. Pero es mucho peor que no se diga, y que no se reflexione sobre ello.

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Y mientras, nos leemos mañana.